Gifted & Talented

He tenido un problema muy grande mientras leía Gifted & Talented de Olivie Blake porque los personajes son odiosos. Están representados de tal manera que la primera reacción, muy visceral, es odiarles con todas tus ganas y encima desde ahí, ya solo puedes ir subiendo porque sus acciones tampoco es que desdigan la primera impresión.

La novela trata sobre tres hermanos, hijos de un poderoso magnate tecnomante, que a su muerte deberán resolver las rencillas y los años de problemas que se han ido enquistando en sus relaciones. Creo que Blake quería hacer uso del tropo de “pobre niño rico” pero en realidad le ha salido el de “estúpido niño rico insoportable apártate de mi vista”.

Meredith, Arthur y Eilidh, son harina de un costal bastante especial. Meredith, considerada un genio desde su más tierna infancia, decidida a crear una tecnología que haga feliz a la gente se vendió al mejor postor, que resultó ser un enemigo acérrimo de su padre. Y la jugada no le salió muy bien. Arthur, uno de los congresistas más jóvenes de la historia de EE.UU. dedica el tiempo que le queda entre orgía y orgía a fracasar con cada una de sus legislaciones. Y Eilidh, antaño una gran bailarina, sufrió el descenso a los infiernos de una lesión que truncó su carrera. No nos engañemos, Gifted & Talented es un culebrón de mucho cuidado con ciertos toques de magia para que sea encasillable como dentro del fantástico y también para que la autora pueda manejar las situaciones inverosímiles que se le vengan a la cabeza, como desencadenar miniplagas de Egipto en algunos momentos determinados o que la gente muera sin problemas para recuperarse después.

Hay que reconocer que la autora puede crear personajes fascinantes, aunque la trama luego vaya dejando cosas que desear. Mostrando las miserias de Los ricos también lloran, alcanza a un público cansado de ver cómo todos triunfan y prosperan a su alrededor, achacándolo a la cultura del esfuerzo cuando es evidente que no todos parten del mismo punto. En este sentido, la crítica de Blake es acerada, precisa e incluso divertida por momentos.

La elección del narrador es bastante retorcida y es uno de los alicientes de la lectura, ya que es omnisciente, pero a partir de cierto punto rompe contantemente la cuarta pared de una forma socarrona. Este es uno de los alicientes de la lectura, la verdad.

Supongo que pronto la veremos traducida a nuestro idioma.

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