Yesterday’s Kin

yestedayLa ficción corta vive un renacer en nuestro país. Algunos de los mejores libros publicados en español el año pasado eran antologías de relatos de no demasiada longitud y distinta temática.

Este hecho, que es sorprendente en España, nunca ha dejado de producirse en los países anglosajones. Buena muestra de ello es la publicación de este Yesterday’s Kin, con el que sin duda Nancy Kress se postula para varias nominaciones a los distintos premios de género.

La autora utiliza dos puntos de vista para narrar la llegada de los alienígenas a la Tierra, la doctora Jenner y su hijo Noah. La doctora acaba de publicar un estudio en biología relacionado con el ADN mitocondrial. Su hijo, que aporta una visión más personal a la historia, es adicto a una sustancia denominada sugarcane, que permite encarnar otras personalidades que él considera más a sí mismo. El punto de inflexión en el relato es la llegada de los Denebs, que traen una avanzada tecnología y una noticia terrible para la humanidad.

La autora mezcla la biología con algunas ideas de ciencia ficción, como la panspermia, en un cóctel equilibrado que deja un buen sabor final. Los dos puntos de vista distintos facilitan la narración, contraponiendo la orientación más cerebral y científica de la doctora con la más sentimental de su hijo. Conforme pasa el tiempo, sin embargo, la evolución de la historia provocará cambios, bastante radicales, en ambos personajes y en su forma de contar lo que ocurre, algo manejado de forma muy natural y acertada por Kress.

El ritmo es adecuado. Nancy expone los descubrimientos científicos de una forma perfectamente comprensible. La única pega que se le podría buscar, ya poniéndonos tiquismiquis, es que el futuro de la humanidad se vea tan afectado por las acciones de una sola familia. Pero para eso son los protagonistas de la historia.

En definitiva, Yesteday’s Kin, es una buena historia, mucho mejor que After the fall, before the fall, during the fall.

Alcatraz versus the Scrivener’s Bones

scrivenersDespués de una buena experiencia con el audiolibro Legion : Skin Deep y en vísperas de un largo viaje en coche, decidí darle una oportunidad a la segunda entrega de la serie de Alcatraz, de Brandon Sanderson. Si la primera ya me había gustado, seguramente la segunda también.

No me equivocaba con esa suposición. Aún siendo una novela juvenil, o quizá precisamente por eso, Alcatraz versus the scrivener’s bones es una risa constante. No esperéis mucho contenido ni reflexión en esta libro, no es su cometido.

Sanderson usa (y en ocasiones abusa) el método de atravesar la cuarta pared para establecer un diálogo directo con el lector. Estas pequeñas entradillas en cada capítulo resultan un poco confusas en el audiolibro, porque el narrador no diferencia en su tono unas de otras. Se trata de un contratiempo menor, al cabo de unos capítulos ya nos hemos acostumbrado.

El autor no deja pasar la oportunidad de meterse consigo mismo, con otros autores de fantasía y con el mismo género a lo largo de los capítulos de esta entrega de la serie. Uno de sus argumentos favoritos es la extrema longitud y peso de los libros de fantasía, lo que los conviene en armas contundentes ideales en cualquier pelea. Seguro que más de una persona le habrá hecho notar que las dimensiones de sus sagas provocan dolores de espalda al más pintado. No me extrañaría que en algún futuro reconociera ingresos secretos por parte de las asociaciones de fisioterapeutas y quiroprácticos de EE.UU.

Los sistemas de magia siguen siendo uno de los puntos fuertes del autor. Aquí, sigue explorando las reglas y las relaciones entre la tecnología y la magia. También parece claro el camino que seguirá en los siguientes libros de Alcatraz, ya que se ven algunos indicios en la parte final de esta narración.

En definitiva un libro divertido, para pasar un buen rato y que nos da una idea del buen hacer de Sanderson en distancias más cortas de las habituales.

Cataveiro

cataveiro-pb-coverUno de los primeros libros que reseñé en el blog fue el prometedor debú de E.J. Swift, Osiris, así que cuando tuve la oportunidad de leer Cataveiro no me lo pensé dos veces.

El principio de esta segunda entrega de The Osiris Project deja bastante descolocados a los que buscaran la continuación directa del primer libro. Nada más lejos de lo que la autora nos ofrece. Se abre el enfoque de manera extraordinaria y tenemos la oportunidad de conocer mejor este mundo postapocalíptico en el que se sitúa la acción.

Uno de los pilares en los que se basa la novela es el worldbuiliding, el exhaustivo trabajo creativo que supone crear todo un nuevo mundo con sus reglas, leyes, personajes… Cada uno de los “países” que se mencionan en la lectura son distintos de los demás, con creencias políticas, religiosas y de otra índole situadas en polos opuestos. Desde el miedo atávico a la tecnología al temor al contagio, todo son detalles que dotan de profundidad a la historia. La dualidad norte-sur que se desprende en toda la historia es quizá un reflejo de la situación actual, aunque la similitud más llamativa es la presencia de una sociedad mercantilista donde todo, absolutamente todo, tiene precio

La historia narrada en Cataveiro nos ofrece varios niveles de lectura. Quizá el más obvio es el relacionado con el cambio climático, pero no es el único. La novela presenta diferentes tramas donde la política y los juegos de poder sustentan la narración. También podríamos dar importancia a la experimentación con virus que dieron lugar al mundo en el que se desarrolla la novela. Incluso podríamos hablar de literatura de viajes, ya que los personajes realizan un viaje tanto físico como espiritual. Son tantos los matices que nos encontramos al leer Cataveiro que es posible que algo se nos pase por alto.

Los personajes son otro de los puntos fuertes de esta novela. Ramona y Taeo centran el discurso, están bien construidos y son consecuentes con sus actos. Pero también se despliega ante nosotros toda una plétora de personajes secundarios intrigantes y seductores sobre los que nos gustaría saber más (y de los que quizás tengamos más noticias en Tamaruq). A mi entender, destaca entre todos the Alaskan, sobre el que acabamos sabiendo algo pero a la que envuelve un halo de misterio sobre el que me encantaría que la autora aportara algo de luz.

Un pequeño defecto que sin duda se podría obviar es el ritmo de la novela, que en ocasiones se ralentiza mucho. Creo que el tono pausado de la prosa de la autora inglesa se adapta perfectamente a lo que nos quiere contar, pero en ocasiones mi propia impaciencia lectora hacía que quisiera adelantar los acontecimientos.

El inconveniente de escribir sobre un futuro posible basándose en el presente es que a veces los acontecimientos actuales cambian la situación de partida. Me gustaría saber que pensó E.J., que comienza este libro hablando de las intocadas líneas de Nazca, cuando Greenpeace decidió dejar un mensaje allí.

El hecho de que sea una segunda parte no desluce en nada la novela, ya que salvo por pequeños detalles no parecería estar relacionada con Osiris, aunque obviamente leerla antes hace que la visión de conjunto de la obra sea la buscada por Swift.

Henshin

henshinLa cultura japonesa me fascina, así que siempre que tengo oportunidad leo al respecto. En esta ocasión he podido leer un manga de Ken Niimura cuya particular ascendencia lo hace muy conocido por estos lares.

Henshin lo conforman varios relatos cortos, que no tienen un hilo conductor claro, aunque si que se repiten algunos personajes, siendo el principal de ellos el propio Ken.

Los relatos, que se basan en el costumbrismo más cotidiano tienen un componente fantástico “extraño”, como gente con superpoderes o monstruos provocados por la furia de un gaijin. Los hay más arriesgados y menos, aunque todos necesitan una aproximación amigable por parte del lector. Me gusta el giro final que aporta una nueva visión a cada historia, pero este mismo giro sorprendente me impide comentar más a fondo las historias, para evitar caer en el spoiler.

En el aspecto gráfico, los trazos del mangaka parecen simples pero son muy expresivos. Los personajes se caracterizan tanto por sus diálogos como por sus rostros, de forma que guión y dibujo se aúnan para contar la historia.

Otra cosa que quiero añadir y que me ha resultado muy curiosa es el orden de lectura japonés, algo a lo que nunca me había enfrentado en formato digital. Es raro que no se haya escaneado directamente para leer seguido, así que se tiene que empezar por el final e ir dándole al retroceso de página en vez de al avance. Muy raro.

El marciano

elmarcianoLas tendencias en los gustos literarios son para mí un misterio inescrutable. Que una obra como El marciano sea un superventas, y que vaya a ser llevada al cine, me sorprende mucho. La razón de su éxito puede ser el individualismo exacerbado tan del gusto de los estadounidenses, pero aún así, muchas veces la lectura se asemeja a un test de problemas que le surgen al protagonista y las soluciones que encuentra. ¿Pero cómo llevarán a la gran pantalla un soliloquio sobre el cultivo de patatas en Marte? Misterio.

Mark Watney es un astronauta que, por pura mala suerte, es dado por muerto en Marte, mientras sus compañeros tienen que volver precipitadamente a la Tierra a causa de una tormenta de arena. Esta situación, que debería llevar inevitablemente al desastre, es superada por Mark. Es tan hábil e inteligente que deja a MacGyver a la altura de un rábano con encefalograma plano.

Realmente la tensión dramática brilla por su ausencia. El marciano se publicó originalmente por entregas y, quizá leyéndolo así, se podría tener algo más de suspense entre capítulo y capítulo, pero en el formato de novela no lo consigue.

La forma escogida para llevar la narración son entradas de diario que el astronauta va escribiendo cada día, con lo cual se desperdicia también toda la tensión argumental que pudiera llegar a tener el libro. Si sigue habiendo páginas de diario, sigue habiendo astronauta.

A mitad del libro parece que el autor se da cuenta, e incluye otros puntos de vista, desde la nave que se aleja de Marte o desde el centro de control de la NASA en la Tierra. Esto es un punto a favor en la lectura, ya que algo de variación se agradece. Los personajes no dejan de ser bastante planos, pero al menos tienen distintas opiniones y da lugar a algo de debate.

Creo que un debate más interesante sería definir si esta novela es realmente ciencia ficción o no. Para mí, es más bien literatura de aventuras, con un fuerte componente tecnológico y científico, por supuesto, pero no ciencia ficción. Necesito algo más alejado de la realidad o con un novum distinto para que me encaje como perteneciente al género. Esto, por supuesto, es una opinión personal. Quizá solo por tomar un escenario en el que se están enviando exploraciones a Marte ya debería encuadrarse en la ciencia ficción.

Lo cierto es que, aunque el libro no me ha gustado como tal, y preferiría que otras obras tuvieran el reconocimiento que esta está recibiendo, si consiguiera la suficiente difusión como para dar un buen empujón a la carrera espacial, me tendría que dar por satisfecha.

Una cosa es segura, nunca volveré a mirar una patata de la misma manera.

Sovereign

sovereignMe gusta leer de vez en cuando tebeos de los que no tengo referencia. A veces te encuentras con cosas curiosas como este Sovereign de Chris Roberson y Paul Maybury.

La historia, de tintes épicos, está narrada desde tres puntos de vista separados que acabarán encontrándose, como era de suponer.

En un país llamado Khend en el que los muertos vuelven a la vida poseídos por espíritus maléficos, la única opción para evitar este levantamiento es llevar a cabo los ritos funerarios adecuados, aunque pertenecer a la orden religiosa que los lleva a cabo te convierta en un apestado. La comodidad y el olvido ha hecho que se pierdan estas costumbres en las zonas más pobladas, provocando la creación de un caldo de cultivo excelente para una futura invasión. Khend, como confirma el propio Roberson, está basado en la India del siglo XVII, así que el sistema de castas está firmemente implantado en la sociedad.

Este volumen es solo la primera entrega de la serie y se nota en la lentitud con que se desarrolla la acción, ya que es necesario situarnos en el escenario e ir presentando a los personajes. Realmente nos quedamos con ganas de saber más cada vez que se cambia el punto de vista, con un uso adecuado de los cliffhangers por parte del guionista.

En el apartado gráfico, el dibujo y los colores son engañosamente simples. Parece un efecto buscado por el artista, que dota de cierto aire oriental a todos los personajes y  los decorados, con figuras en algunas ocasiones hieráticas. No ha sido especialmente de mi agrado, aunque esto es algo personal.

Si puedo, leeré la segunda parte, pero este Sovereign no me ha dejado huella como para esperar ansiosamente la siguiente entrega.

Explaining Cthulhu to grandma and other stories

tograndmaAlex Shvartsman es una persona polifacética. A su vertiente como editor de la que sabemos gracias a sus recopilaciones de relatos humorísticos (UFO 1, 2 y 3) y otras labores que conocimos gracias a la entrevista que nos concedió, hoy podemos hablar del Alex escritor, con introducción de lujo por parte de Ken Liu.

“Explaining Cthulhu to Grandma”

Divertidísima historia, que podréis leer en español próximamente en Cuentos para Algernon y que mereció el premio WSFA Small Press.

La idea de una tienda de empeños con objetos mágicos que se perpetúa en el tiempo es muy atrayente y cuando la nieta de la dueña consigue comprar al propio Cthulhu en un práctico recipiente, habrá muchos interesados en conseguir esa peligrosa propiedad.

“The Rumination on What Isn’t”

Durísima historia sobre la paternidad y a qué extremos estaría dispuesto a llegar un padre por estar más tiempo con su hija. El autor dice que la escribió en una hora, no me cabe duda de que debió ser una hora horrible.

“Doubt”

Típica historia de asesinos profesionales equipados con nanotecnología. No es destacable.

“Spidersong”

Relato sobre la colonización de un planeta ajeno y la adaptación al entorno y a la fauna existente. El toque final lo torna mucho más profundo de lo que aparenta.

“Things We Leave Behind”

Preciosa historia, muy personal. Una familia tiene que emigrar desde Rusia a Estados Unidos y dejar atrás todas sus pertenencias, incluídos sus libros, que tanto bien hacían a la gente. Pero siempre hay una puerta abierta a la esperanza y al futuro.

“The Epistolary History”

Ciertamente, el viaje en el tiempo es uno de los recursos más utilizados en la ciencia ficción. Mezclarlo con una forma epistolar de contar la historia le da un toque refrescante que se agradece.

“A Shard Glows in Brooklyn”

Una historia de fantasía urbana escrita con oficio lo suficientemente entretenida como para pasar por alto las similitudes con la trilogía de los guardianes de Sergei Lukyanenko. Con ciertos toque “a lo Dresden” deja con ganas de hacer nuevas visitas al mundo de Conrad Brent, algo que sucede en el siguiente relato.

“Requiem for a Druid”

Seguimos con las historias de Conrad Brent. En esta ocasión hay una guerra de cultos y unos intereses inmobiliarios de por medio. Muy divertido.

“Nuclear Family”

Un acercamiento no muy original a un escenario postapocalíptico.

“Bedtime Story on Christmas Eve, 1,000,000 AD”

Si alguna vez habéis comprobado cómo se deforma una historia según se va contando y va pasando por distintas personas, ya sabéis cómo funciona este futurista relato.

“Seven Conversations in Locked Rooms”

Tener la oportunidad de borrar los malos recuerdos es una elección muy personal que puede o no ser beneficiosa. Cuando a los presos se les da a escoger entre la pena de cárcel y el borrado selectivo, no todos eligen el mismo camino.

“High-Tech Fairies and the Pandora Perplexity”

Volvemos a visitar la tienda de empeños de Lydia. Aunque en esta ocasión la resolución es menos imaginativa que en “Explaining Cthulhu to Grandma”, no deja de ser chocante.

“The Keepsake Box”

Con una inspiración parecida al relato anterior, este cortísimo cuento da idea de lo peligroso que puede resultar el despecho.

“The Field Trip”

Una de las primeras publicaciones de Shvarstman, algo que se nota por lo “manido” del recurso en el que se basa, pero aún así se deja leer.

“Superior Firepower”

Otra publicación muy temprana, en la que se nota cierta bisoñez en la historia.

“Life at the Lake’s Shore”

En una pequeña aldea rusa un niño aprende a pedir deseos a los peces del lago. Pero el precio que deberá pagar por verlos cumplidos puede ser demasiado alto. Me gusta el paralelismo entre la vida de Fyodor y la historia de la URSS.

“The Take”

Otra historia sobre grabación y borrado selectivo de memorias, menos emotiva que “Seven Conversations in Locked Rooms”.

“The Dragon Ships of Tycho”

Un acercamiento a la ciencia ficción de primer contacto que no resulta muy original tras haber leído el relato de Elizabeth Bear en Space Opera, por ejemplo.

“A Brief Respite from Eternity”

Una historia de amor en el fin térmico del universo. Escrito con oficio pero demasiado previsible.

“A Thousand Cuts”

El terror no es de mi gusto, pero esta historia de miedos domésticos no está nada mal.

“Ravages of Time”

Otro relato tomando una idea muy utilizada en la ciencia ficción, el relativismo temporal y cómo afectaría a las relaciones familiares. Me gusta el giro final de la historia, que no por previsible deja de ser agradable.

“Price of Allegiance”

La humanidad se ha unido recientemente a la Alianza Galáctica, pero solo recibe las migajas del conocimiento compartido por las distintas razas que la componen. ¿Cómo actuará el embajador humano en la Alianza cuando se encuentra en una encrucijada?

“The Tell-Tale Ear”

Irónico relato en contra del aluvión publicitario al que nos vemos sometidos constantemente en la sociedad actual. Muy refrescante.

“The Miracle on Tau Prime”

Dan Simmons ya nos enseñó en Hyperion de lo que podría ser capaz la iglesia en el universo, por eso resulta tan impactante este corto relato sobre un milagro alienígena.

“The Tinker Bell Problem”

Para que Campanilla viviera solo necesitaba que los niños creyeran en ella. En este cuento  también juegan un papel fundamental las creencias de los demás.

“True Love”

La búsqueda del amor verdadero a lo largo de la historia no trae más que desencantos a una viajera temporal. Y es que el tiempo todo lo magnifica, y los relatos que nos llegan sobre la belleza de Helena de Troya y el amor de Paris quizá no sean totalmente fiables.

“You Bet”

Una historia basada en la portada del primero Unidentified Funny Objects que basándose en una premisa tan floja no da mucho más de sí.

“The Far Side of the Wilderness”

No me ha convencido esta historia sobre la colonización humana de las estrellas. Recuerda demasiado a cierta historia bíblica, como el propio autor reconoce.

“Worldbuilding”

Homenaje a los escritores pulp de la época dorada de la ciencia ficción, que se ganaban la vida a diez centavos la palabra y no paraban de escribir sobre BEMs y astronautas ligeras de ropa, con un giro final que resulta gracioso.

“In the Wake of the Storm”

Mezcla de magia y catástrofes naturales con algo de amor. Lo más emotivo es conocer la situación que inspiró a Alex para escribir la historia.

“Putting It All Together”

Me gusta esta historia que recuerda a una de las más celebradas de Asimov, otro autor ruso de nacimiento que emigró a los Estados Unidos.

“Dominoes Falling”

Este relato está basado en el universo de un juego, no es una creación propia de Shvartsman y me temo que se le nota constreñido por las limitaciones impuestas por una creación ajena. Curiosa lucha de facciones políticas, sin más.

“Notes on the Game in Progress, Played Almost to a Draw”

Haberse ganado la vida como jugador profesional de Magic forzosamente se tiene que notar en la ficción que escribe este autor, aunque este cuento nos recuerde más al Civilization que a otra cosa. Además, me gusta mucho el giro final.

“Small Magics (*)”

Esta historia y “The Hourglass Brigade” son originales para esta antología. Alex se desenvuelve bien en bastantes terrenos y esta fantasía con tonos paternalistas es un buen ejemplo. Ante la amenaza de los gnomos, las hadas intentan defenderse utilizando sus pequeños dones lo mejor que pueden.

“Icarus Falls”

Preciosa historia sobre la pérdida de la memoria. Cualquiera que haya tenido un familiar con Alzheimer reconocerá algunas de las escenas que se relatan, y lo sentirá en lo más profundo de su ser.

“Coffee in End Times”

Co-escrita con Alvaro Zinos-Amaro. Aunque parece la típica historia de supervivencia frente a una invasión alienígena, realmente tiene más profundidad que esto. No me importaría ver otra colaboración entre estos autores.

“The Hourglass Brigade (*)”

Las paradojas temporales y el servicio de “policía del tiempo” es un recurso muy explotado en la ciencia ficción. Este relato es otra historia más sobre lo mismo, no me parece que aporte nada nuevo.

“A One-Sided Argument”

Historia tramposa sobre los resultados de un accidente espacial. No se puede hablar mucho más de él sin revelar sorpresas.

“How Earth Narrowly Escaped an Invasion from Space”

Claro exponente del humor gamberro de Alex, como el mismo dice. No pasará a la historia de la ciencia ficción pero te hará pasar un buen rato.

“Fate and Other Variables”

Estupendo colofón a la edición impresa de esta colección de historias. Recuerda vagamente al famoso relato de Clarke sobre los nombres de Dios, pero tiene una orientación totalmente diferente. Se tratan temas como el libre albedrío, la Cábala y las relaciones fraternales. Es uno de mis favoritos del libro.

Si quieres pasar más de un buen rato leyendo relatos cortos y soltar alguna que otra carcajada, te recomiendo que no dejes pasar la oportunidad de hacer con Explaining Cthulhu to grandma. Y si no me crees, fíate de Ken Liu, que también lo recomienda.

Sir Pyle

pyle_portadaMe he llevado una sorpresa más que agradable con este recopilatorio que compré en un arrebato y del que he disfrutado como un niño el día de Reyes.

Sir Pyle. S Culapio es un mitólogo al mejor postor, ofrece sus servicios a todos los seres de leyenda con que se encuentra, desde la momia alérgica a las vendas al yeti con problemas de frío. La mayoría de los arcos argumentales son historias cortas que va contando a su criado, casi siempre con un giro final hilarante.

El tono del tebeo es satírico a más no poder, cargado de mucha mala idea, la que tiene el propio personaje y la que va encontrando por el mundo.

En este tomo recopilatorio tenemos los tres álbumes que se publicaron hace más de diez años en Francia. El nivel, excelente en la primera entrega, va bajando en las posteriores, aunque no dejan de ser entretenidos.

En el aspecto gráfico la labor de Munuera se adapta perfectamente al guión de Morvan. El español despliega todo su don para la caricatura y para la antropomorfización de los animales. El color de los tebeos también es acorde al dibujo y al público al que está dirigido, ya que nos encontramos ante una obra juvenil.

Sir Pyle es una persona ruin y como tal se comporta. Aún así, en el segundo tomo vemos algunos flashbacks de su extenso pasado (a pesar de su aspecto se trata de una persona muy longeva) que se utilizan para dar profundidad al personaje, quizá pensando en futuras entregas que quedaron en el tintero.

La longitud de los relatos permite a los creadores plantear multitud de escenarios, pudiendo pasar de algunas imágenes con la Alhambra de fondo al lejano Oeste en un breve espacio de tiempo.

En el tercer álbum, el que menos me ha gustado, los autores se ríen de sí mismos, atraviesan la cuarta pared y nos hacen partícipes de su labor. Aquí interviene también como dibujante Rubén.

Un tebeo muy recomendable si quieres pasar un buen rato.

The red magician

img-goldsteinredmagicianOpen Road Media ha reeditado recientemente este The red magician de Lisa Goldstein, una obra ganadora del National Book Award pero que había caído en un olvido algo injusto.

La acción se sitúa en una pequeña aldea judía de incierta ubicación durante la segunda guerra mundial. Un día se aloja con una familia del pueblo un curioso personaje pelirrojo llamado Vörös. Casi sin quererlo, se enfrenta con el rabino. Ambos poseen conocimientos cabalísticos y la magia de los nombres puede ser poderosa.

A pesar de lo que pueda parecer la historia en realidad gravita en torno a una de las hijas de la familia que acoge temporalmente a Vörös, una joven llamada Kicsi, con la que viviremos los horrores del Holocausto, aunque de una forma muy somera, ya que la autora deja mucho a la imaginación del lector. Lo cual puede ser incluso peor que exponer la cruda realidad, ya que todos conocemos las terribles situaciones que tuvieron lugar en los campos de concentración.

La novela es corta y se lee en poco tiempo. La prosa, aunque no muy destacable, cumple con su función perfectamente. Me gusta la representación de la magia que transpira el libro, una magia de “andar por casa”, de ilusiones pero con consecuencias reales, que se basa en el estudio y el conocimiento. Quizá podría definirse como realismo mágico en vez de fantasía.

El motor que consigue que avance parte de la trama es la venganza. Una venganza desatinada, injusta, que se convierte en la única motivación de uno de los personajes para seguir con vida. También me parece que está espléndidamente dibujada la sensación de vacío que debieron sentir los supervivientes, que vagaban preguntándose por qué ellos habían vivido cuando otros no. Esta parte es sencillamente aterradora,  no me veo capaz de ponerme en el lugar de los muertos en vida que salieron de los campos de concentración.

Hace un par de años se comentó que el libro iba a salir en español, pero no he vuelto a tener conocimiento de ello. Desde luego me parecería una estupenda noticia.

Legion : Skin deep

skindeepSi aprovechais las oportunidades que aparecen en el blog de vez en cuando, tendréis en vuestro poder Legion : Skin deep del prolífico Brandon Sanderson.

Mi experiencia con los audiolibros no es muy extensa, pero después de escuchar éste creo que repetiré. En el aspecto técnico la calidad de la grabación es muy buena y el narrador demuestra una gran versatilidad dando voz a las múltiples alucinaciones del protagonista, nuestro viejo conocido Stephen Leeds. También es cierto que al oir la historia sobresalen ciertas “muletillas” que utiliza el autor, que quizá pasen desapercibidas al leer.

La historia  es entretenida y se hace corta, además de darnos un atisbo de la capacidad de Sanderson como narrador en un campo ajeno a la fantasía, su terreno más habitual. Aunque es cierto que al ser una segunda entrega se pierde algo de la frescura del original.

Las alucinaciones de Stephen le permiten realizar un trabajo como consultor, una especie de Sherlock Holmes moderno. Sin embargo, el hecho de ser bastante conocido expone sus debilidades a los que pueden ser sus enemigos, que no dudan en sacar provecho de ellas. Esto da lugar a situaciones problemáticas que Leeds resuelve de forma más o menos airosa, aunque en ocasiones pueda parecer forzada.

En esta ocasión la trama gira alrededor de la búsqueda de un cádavez que podría tener información muy valiosa almacenada en sus propias células. La intriga científica no es muy compleja y tampoco es creíble en exceso, pero eso no importa una vez que nos hemos introducido en la historia, ya que Sanderson, administrando los cliffhangers al final de cada capítulo, consigue que siga la tensión.

Es curiosa también la disertación contra el ateísmo que realiza el autor en un momento de la narración. No sé si es un intento del mormón por adoctrinarnos o algo que le sale naturalmente.

El audiolibro no llega a las cinco horas y os aseguro que se pasan volando. En la siguiente entrega, no obstante, me gustaría que la historia estuviera más desarrollada y que se ahondara en la relación del protagonista con sus alucinaciones.