Si tienes curiosidad por ver cómo se desarrolló la ceremonia de entrega de los premios Hugo, está online en este enlace en el que solucionan los problemas de broadcasting que tuvieron.
Knocking on Hugo’s door
Una de las cosas interesantes que nos deja la ceremonia de los Hugo y que quizá pasan desapercibidas para el gran público son las estadísticas del premio. En concreto me llaman mucho la atención los textos que se quedaron a las puertas de ser finalistas en los Hugo y que, por muy pocos votos a veces, no son seleccionados.
En la categoría de novela, por ejemplo, por 17 votos se quedó fuera “Monster Hunter Legion” desconocida para mí, pero que parece tener toda una legión de seguidores. Más atrás quedaron “Existence”, “The hydrogen sonata”… obras que al menos a mí me llaman más la atención que las que finalmente lo consiguieron. Me parece una sonada ausencia “Jack Glass” ganadora del BSFA este año y que no aparece ni entre las 15 primeras.
En novella, “On a red station, drifting” consiguió entrar por 7 votos de diferencia con la siguiente y el premio final lo ha conseguido Brandon Sanderson con su “The emperor’s soul” de forma muy reñida con Mira Grant. Atrás quedaron “The boolean gate”, “Legion” (desestimada por el propio autor) y “All the flavors” de Ken Liu, todas recomendables aunque este año la categoría de novella ha estado muy bien representada.
En novelette es curioso como por un solo voto entró “Rat-Catcher” mientras que “The waves” de Liu quedó fuera. Ken ha estado se ha quedado a punto de entrar en muchas categorías, pero la que más suya se puede considerar, el relato corto, no se le escapa. Me hubiera gustado que hubiera entrado “Astrophilia” a solo dos votos del último puesto.
En short story al final nos quedamos solo con tres representantes debido a la extraordinaria dispersión del voto, algo que quizá debería tenerse en cuenta para futuras ediciones, pues no parece muy justo que por 4 votos entre una obra y otra se desestime.
Por último, me gustaría comentar un hecho curioso. El sistema de votación de los Hugo hace que aunque una persona u obra sea muy nominada no significa que luego sea muy votada. Por ejemplo, “Fade to white” de Valente fue la más nominada en su categoría pero luego quedó tercera.
¿Alguna otra curiosidad que veais en las estadísticas?
The boolean gate
Otro de mis nominados a los Hugo en ficción corta que no consiguió quedar entre los finalistas es “The boolean gate”. Me gustan los relatos encuadrados en lo que se ha dado en llamar historia secreta, que busca lo desconocido en los hechos históricos y rellena estos huecos con fantasía. Uno de los mayores maestros en esta suerte de collage es Tim Powers, pero he de reconocer que Walter Jon Williams no le ha ido muy a la zaga en este caso.
A través los ojos de Sam Clemens (alter ego de Mark Twain) vemos la ajetreada vida en los Estados Unidos de finales del XIX, donde se cuajaron grandes fortunas que duran hasta nuestros días y donde los progresos de la tecnología se veían como una lucha constante entre dos intelectos privilegiados, Edison y Tesla.
Sam es amigo de Nikola Tesla, y éste le va comentando sus progresos con la electricidad, los controles remotos y la aplicación de la lógica booleana a la mecánica. Pero a Clemens le surge la duda, ¿de dónde vienen los raptos de genio del serbio?
Podría parecer que lo más interesante de la historia es el plantel de personajes famosos que van apareciendo por ella, aunque sea fugazmente, algo que al menos en mi caso hace que tenga que tirar de Wikipedia para captar los detalles que el autor deja caer. Sin embargo, lo que se ganó mi voto dentro de “The boolean gate” es el conflicto interno que sufre Sam entre su personalidad real y la inventada y cómo esto ha tenido repercusiones durante toda su vida. A pesar del amor que profesa a su esposa no puede estar con ella por indicación médica y este dolor se refleja en sus últimos escritos, pero como Mark Twain no puede dejar de ser un jocoso personaje que consigue portadas de periódicos por sus frases irónicas casi sin esforzarse. Se siente culpable por la muerte de su hijo mientras que va vestido de blanco para captar la atención de todo el que pasa a su lado. Esta dualidad podría ser otra interpretación del título, La puerta lógica, solo existe el blanco y el negro, no hay matices intermedios.
Un muy buen relato que puedes leer aquí de forma gratuita.
Primeras impresiones ganadores premio Hugo
Gracias al madrugador blog de Pedro, que ha presentado en su blog una completa lista,ya conocemos los ganadores de los Hugo, 2013. Siento mucho que Aliette no haya ganado ningún premio, pero así votaremos sus historias con más ganas el año que viene.
Os los pongo aquí con un enlace a mi comentario:
- Writing Excuses, séptima temporada. Brandon Sanderson, Dan Wells, Mary Robinette Kowal, Howard Tayler and Jordan Sanderson (web)
- Los Vengadores, Joss Whedon (Marvel Studios, Disney, Paramount)
Mejor obra dramática, forma corta
- Juego de Tronos: «Blackwater», George R.R. Martin, Neil Marshall, David Benioff y D.B. Weiss (HBO)
- Stanley Schmidt (editor de Analog)
- Patrick Nielsen Hayden (editor de Tor) (blog)
- John Picacio (web)
- Clarkesworld, editado por Neil Clarke, Jason Heller, Sean Wallace y Kate Baker (web)
- SF Signal, editado por John DeNardo, JP Frantz y Patrick Hester (web). (Tras ganarlo varias veces se retiran de posibles nominaciones para dar paso a nuevos “fanzines”)
- Tansy Rayner Roberts (blog)
- Galen Dara (web)
- SF Squeecast, Elizabeth Bear, Paul Cornell, Seanan McGuire, Lynne M. Thomas, Catherynne M. Valente y David McHone-Chase (enlace). (Tras ganarlo dos veces seguidas se retiran de posibles nominaciones para dar paso a nuevos “fancasters”).
Mejor traducción (premio Seiun, otorgado por jurado japonés):
- Paolo Bacigalupi (forma corta)
- John Scalzi (forma larga, novela)
Premio especial de la presidencia Lonestarcon
- Stanley Schmid (editor de Analog)
Premio honorífico (Big Heart)
- Tom Veal
¡Enhorabuena a los ganadores!
Desvelado el trofeo del premio Hugo 2013
Nominados a los premios Campbell 2013
Tras haber leído todo lo que venía en el Hugo Voter Packet para votar el premio John W. Campbell me he dado cuenta de dos cosas; hay mucho talento entre los escritores noveles y es muy difícil comparar trabajos de distinta extensión.
Esta segunda puntualización que hago es para aclarar que aunque me han gustado los relatos cortos que he leído de Zen Cho y Mur Lafferty, su longitud apenas permite vislumbrar su estilo o sus ideas, mientras que los nominados que ya tienen novelas parten con la ventaja de que la “muestra” de su trabajo es más extensa.
Es por esto que mi votaciones quedan así:
- Chuck Wendig, la fantasía cruda y descarnada que nos ofrece en “Blackbirds” me ha conquistado.
- Max Gladstone, espero con impaciencia su segundo libro “Two serpents rise” y si sigue la estela del anterior, lo nominaré al Campbell y quién sabe si algo más. Su “Three parts dead” es muy recomendable.
- Stina Leicht, leí el año pasado “Of blood and honey” y a pesar de ciertas inexactitudes históricas y algunos momentos de confusión en la narración, merece esta posición. Me hubiera gustado que se hubiera incluido “Blue skies from pain” para haber visto su evolución como escritora, pero no ha sido así.
- Zen Cho, dentro de la fantasía con toques orientales que parece que está en boga últimamente, Cho destaca por el delicado tratamiento de los sentimientos familiares.
- Mur Lafferty, es la que menos sobresale de todos los nominados, lo que no quiere decir que sea mala escritora. Su “The Shambling Guide to New York City” me llama la atención.
¿Habéis leído los Campbell? ¿Qué os han parecido?
Three parts dead
Las mayores alegrías de las lecturas de los nominados a los Hugo me las estoy llevando con los Campbell. A la excelente “Blackbirds” se une esta entretenidísima obra de fantasía que es “Three parts dead” de Max Gladstone.
Una novela que empieza con un prólogo en el que muere un Dios (Kos Everburning) y que ya en los primeros párrafos del capítulo está a punto de matar a la protagonista lanzándola al vacío desde una ciudad flotante se puede decir que empieza fuerte. Y aunque hay algunos altibajos en el ritmo de la historia, por lo general es trepidante y el último tercio del libro te atrapa de tal forma que no puedes dejar de leer.
Aunque está narrado desde varios puntos de vista, el personaje principal es Tara Abernathy, una estudiante de magia (llamada Craft) que a pesar de ser expulsada (defenestrada) de las Hidden Schools recibe una oferta de trabajo de la firma Kelethras, Albretch y Ao para que trabaje para ellos. Su primera tarea: resucitar a un Dios.
Resulta muy curioso el sistema de magia que utiliza el autor en la novela, basado en transacciones de poder. Los cultos de cada Dios firman contratos con las partes interesadas de forma que “prestan” el poder y a cambio reciben de vuelta este mismo poder con intereses. Una visión muy mercantil de la adoración a los dioses, que puede causar problemas cuando se presta más de lo que se tiene. También me ha llamado la atención que se organice la información de estas transacciones en la tercera forma normal y que se hable de capas de abstracción para facilitar la consulta de estos datos mediante magia. Creo que es la primera vez que veo términos informáticos mezclados con la fantasía y la magia de esta manera (será que no he leído a Charles Stross y sus Atrocity Archives).
A pesar de que está claro quién es el personaje principal, también hay un reparto coral que añade profundidad a la historia con los que nos podemos sentir más identificados. Abelard es un monje del culto de Kos que estaba presente cuando su Dios murió y Cat es una amiga suya que sufre una extraña adicción. Ambos jugarán un papel fundamental en la historia aunque quizá la más interesante sea Lady Kevarian, que será la tutora de Tara en su primer encargo.
Me gustaría destacar también esa tendencia actual que se da en los libros de fantasía a dejar caer referencias de hechos pasados que no se explican pero que causan en el lector varios efectos que le interesan al autor; curiosidad por conocer estas historias, “sensación de profundidad” en el escenario, motivaciones de los personajes que no hay que explicar detalladamente…
El libro es autoconclusivo, pero deja abiertas las puertas a la continuación, que se publicará en octubre de este año bajo el título “Two serpents rise” y que tengo intención de leer.
No solo de lectura se vive : Podcast Los VerdHugos
Como ya habréis podido comprobar en algunos artículos anteriores, me gusta escuchar podcasts sobre literarura fantástica y ciencia ficción y aprovecho los pocos momentos de los que dispongo para colocarme los cascos. La principal dificultad con la que me encuentro es que la mayoría de estos podcasts son en inglés y tengo que afinar mucho el oído para entenderlo todo, aunque los participantes tengan la dicción clara. La culpa no es suya, por supuesto, es de mi comprensión. Por esto, representa todavía un placer más grande poder escuchar hablar de mis géneros favoritos en español.
Los VerdHugos son cuatro amigos que se juntan de vez en cuando para charlar sobre ciencia ficción y fantasía, y aunque en un principio esta conversación estaba orientada a hablar de los premios Hugo (hay una pista en el nombre), en general la conversación puede tomar otros derroteros tanto o más interesantes. También se aceptan colaboraciones, los llamados VerdHugos Jr. donde algún invitado puede comentar un libro o hacer anuncios relacionados con el mundillo.
También realizan algunas lecturas conjuntas de relatos en las que es bueno participar, es recomendable leer simultáneamente con otras personas porque enriquece mucho la experiencia lectora y te ayuda a ver aspectos de las obras que quizá a ti te habían pasado desapercibidos.
La última incorporación han sido las recomendaciones que hacen al final del podcast sobre libros para leer, que siempre es algo interesante viniendo de gente que conoce el paño. También es cierto que si sabemos qué es lo que le gusta a cada uno de los VerdHugos podemos afinar nuestra elección escogiendo al que esté más en sintonía con nosotros.
La duración es variable. Las conversaciones no se ajustan a un guión, aunque parece que sí tienen unas guías a las que no hacen mucho caso, pero no es importante.
La producción del podcast es correcta, se oye con mucha claridad y aunque a veces hay ruidos de fondo esto no entorpece la escucha. La única pega, por poner alguna, es la periodicidad cuando menos aleatoria con la que aparecen los capítulos, debido seguramente a las apretadas agendas de los contertulios.
Son unas grabaciones muy recomendables para cualquier interesado en la llamada literatura prospectiva.
Blackbirds
La violencia en la fantasía urbana tiene la capacidad de perturbarnos más de lo que lo hace esa misma violencia en otros ámbitos como la fantasía épica. El entorno urbano actual la hace más cercana y es por ello que nos afecta más.
Esta pequeña introducción quiere servir como aviso a navegantes, “Blackbirds” es un libro muy perturbador, pero aún así es imposible dejar de leerlo.
Miriam es la protagonista de nuestra historia. Posee la capacidad de ver cómo y cuándo morirán las personas a las que toca y por más que lo ha intentado es incapaz de cambiar este destino. La amargura inunda cada uno de los actos de su vida, ya que no puede entablar ninguna relación con otros, sabiendo lo que el futuro les deparará. Sobrevive a base de robar lo que puede a las personas que sabe que van a morir pronto, como el ave carroñera con la que se suele comparar. En el ambiente en el que se mueve, aparece como una luz salvadora Louis, un camionero amable que intenta defenderla pero que está destinado a un trágico fin en el que ella jugará un papel importante.
El estilo de Chuck Wendig es directo y muy efectivo. Establece unas comparaciones bestiales con un humor negro pasado de vueltas en la mejor tradición de los escritores noir como Philip Kerr. El ritmo de la lectura es acelerado, pero porque el autor así lo desea y se puede describir el último tercio del libro como un descenso en un viaje en montaña rusa que no quieres mirar pero del que no puedes retirar la vista. También hace uso de flashbacks y cortes en la narración que están perfectamente situados para relajar la tensión que va in crescendo en el libro y luego seguir pisando el acelerador sin concesiones.
Los personajes merecen un párrafo especial para ellos solos. Todos están sólidamente construidos y son creíbles, pero es que Miriam sobresale por encima de los demás como el alma torturada que es y que se revuelve ante la injusticia de su existencia.
La violencia de la que hablaba al principio del artículo puede suponer una barrera de entrada para algunos lectores, aunque incite a otros. Pero creo que se debe dar una oportunidad a “Blackbirds”, hacer de tripas corazón y enfrentarnos a este libro con la mente abierta.
Chuck ha ganado definitivamente mi voto para el Campbell, porque aunque guardo buen recuerdo de “Of blood and honey” de Stina Leitch, veo en él a un escritor más completo.
Para cerrar el artículo quería mencionar que la portada me parece magnífica. Joey Hi-Fi tiene unos trabajos realmente buenos.
Saucer Country
Éste es otro tebeo nominado para los premios Hugo, y aunque parte de una idea interesante me parece que se pierde un poco en su propia complejidad, aunque es posible que sea debido a que sólo he leído seis números y la trama se aclare con posterioridad.
Hablar sobre la mitología de las abducciones y de los platillos volantes puede dar lugar a mucha controversia, de hecho, los personajes principales no tienen claro si han sido abducidos o si son víctimas de alucinaciones. La historia se centra en Arcadia Alvarado, la gobernadora de Nuevo México, que decide presentarse a la carrera electoral para ser la primera presidenta de los EE.UU. El hecho de que una mujer divorciada y de origen latino sea candidata a dirigir a la autoconsiderada nación más poderosa del mundo puede crearle muchos problemas, pero esto no es nada en comparación con las “visiones” que sufre, ya que piensa que ha sido abducida por extraterrestes. Este hecho, por supuesto, lo mantiene en secreto pero de forma paralela a su itinerario electoral va a investigar los sitios más conocidos de la “geografía alienígena“, como por ejemplo Roswell.
Existen otros personajes bastante arquetípicos que orbitan a su alrededor, como el ayudante fiel que apoya todas sus decisiones, la publicista que supervisa cada detalle para que el resultado de sus declaraciones sea óptimo y el exmarido con el que se lleva bien. Me llama más la atención el científico “loco” que habla con las figuras humanas de la placa de la sonda Pioneer.
El dibujo, sin ser excepcional, cumple con su cometido. Lo que no me ha gustado es el color, se abusa de los tonos grises verdosos asociados por el imaginario colectivo a los extraterrestres y en ocasiones la disposición de las viñetas resulta confusa.
En resumen, un tebeo que si tengo la oportunidad leeré, pero que no me ha llamado tanto la atención como para seguirlo.