Unholy Land

Lavie Tidhar es un escritor polifacético que lo mismo te escribe una novela juvenil como Candy que se descuelga con un libro de difícil clasificación como Unholy Land.

Digo que es de difícil clasificación porque se puede adscribir a varios subgéneros de la ciencia ficción sin pertenecer en realidad a ninguno claramente.

El protagonista es Lior Tirosh, que podría ser una personificación de propio Tidhar, un escritor de “medio pelo” de origen judío pero afincado en Berlín que por una enfermedad de su padre se desplaza a su lugar de nacimiento. Pero no es Israel, tal y como la conocemos, Palestina es un asentamiento en África, dando el punto de partido a una ucronía absorbente. Además este hecho podría haber tenido lugar en realidad, ya que a principios del siglo pasado se realizó una expedición con la intención de valorar esa posiblidad.

La prosa de Tidhar es tan maravillosa como siempre, con una gran cantidad de juegos metaliterarios y referencias a su propia obra, así como guiños a la situación actual en Israel estableciendo paralelismos con esta mítica Unholy Land de la que nos habla el autor. Pero sin duda lo que resulta más llamativo son las diferentes voces que utiliza. Variando entre una primera persona antinatural, porque no le da la voz al protagonista, una segunda persona desconcertante y una tercera persona que nos sirve para estabilizarnos, el autor consigue un estado permanente de confusión en el lector y exige un esfuerzo constante para situarnos en la trama.

Los cambios de entorno son continuos pero sutiles. Vemos cómo Tirosh actúa de forma contraria a la que esperaríamos depediendo de la situación en la que se encuentre, porque en realidad no es el mismo personaje en todo momento y no estoy hablando solo metafóricamente.

Unholy Land es una novela difícil pero atractiva, con una perspectiva distinta de una ucronía que nos podría recordar a El sindicato de policía Yiddish por su punto de partida pero que navega por derroteros totalmente diferentes. No es para todo el mundo, pero creo que para un lector de ciencia ficción habitual resultará muy atractiva.

Portada de Permafrost

Yo creo que no sorprenderá a nadie que me alegre de una publicación nueva de Alastair Reynolds, pero es que Permafrost tiene muy buena pinta.

La sinopsis:

2080: at a remote site on the edge of the Arctic Circle, a group of scientists, engineers and physicians gather to gamble humanity’s future on one last-ditch experiment. Their goal: to make a tiny alteration to the past, averting a global catastrophe while at the same time leaving recorded history intact. To make the experiment work, they just need one last recruit: an aging schoolteacher whose late mother was the foremost expert on the mathematics of paradox.

2028: a young woman goes into surgery for routine brain surgery. In the days following her operation, she begins to hear another voice in her head… an unwanted presence which seems to have a will, and a purpose, all of its own—one that will disrupt her life entirely. The only choice left to her is a simple one.

Does she resist … or become a collaborator?

Mi traducción:

2080: en un sitio remoto en el filo del Círculo Ártico, un grupo de científicos, ingenieros y físicos se reúnen para apostar el futuro de la humanidad en un último experimento. Su objetivo: hacer una pequeña alteración al pasado para evitar una catástrofe global sin cambiar la historia. Para que el experimento funcione, solo necesitan una última colaboración: una anciana maestra cuya madre muerta era la mayor experta de las matemáticas de la paradoja.

2028: una joven entra en cirugía para una operación cerebral rutinaria. En los días siguientes, empieza a oir otra voz en su cabeza… una presencia no deseada que parece tener un propósito que cambiará su vida. Solo le queda una opción:

¿Resistir o colaborar?

La portada:

Nueva novela de Max Gladstone

Se ha anunciado la publicación de Empress of Forever el 18 de junio del año que viene. No he encontrado mucha información al respecto, pero una nueva novela de Max Gladstone siempre es una buena noticia, pero es que estamos hablando de una space opera, uno de mis géneros favoritos.

Aquí os traigo la sinopsis:

A wildly successful innovator to rival Steve Jobs or Elon Musk, Vivian Liao is prone to radical thinking, quick decision-making, and reckless action. On the eve of her greatest achievement, she tries to outrun people who are trying to steal her success.

In the chilly darkness of a Boston server farm, Viv sets her ultimate plan into motion. A terrifying instant later, Vivian Liao is catapulted through space and time to a far future where she confronts a destiny stranger and more deadly than she could ever imagine.

The end of time is ruled by an ancient, powerful Empress who blesses or blasts entire planets with a single thought. Rebellion is literally impossible to consider–until Vivian Liao arrives. Trapped between the Pride – a ravening horde of sentient machines – and a fanatical sect of warrior monks who call themselves the Mirrorfaith, Viv must rally a strange group of allies to confront the Empress and find a way back to the world and life she left behind.

Y mi traducción:

Una innovadora tremendamente exitosa rival de Steve Jobs y Elon Musk, Vivian Liao is propensa a pensar de formar radical, tomar decisiones rápidamente y actuar de forma temeraria. A punto de conseguir su mayor éxito, intenta adelantarse a quienes tratan de robarle el mérito.

En la fría oscuridad de una granja de servidores en Boston, Viv pone su último plan en funcionamiento. Un terrorífico instante después, es catapultada a través del tiempo y del espacio a un lejano futuro donde se enfrentará a un destino más extraño y mortífero que cualquiera que hubiera imaginado.

El fin del tiempo es controlado por una poderosa y antigua Emperatriz que bendice o destruye planetas enteros con un solo pensamiento. La rebelión es literalmente imposible – hasta que llega Vivian Liao. Atrapada entre el Orgullo (una horda de máquinas sentientes) y una secta fanática de guerreros monjes que se autodenominan Mirrorfaith, Viv debe reunir un grupo de aliados para enfrentarse a la Emperatriz y volver a la vida que dejó atrás.

The Quantum Magician

The Quantum Magician es una novela de contrastes. Basándose en una estructura más que conocida Derek Kunsken realiza un ejercicio de ciencia ficción de ideas apabullante y en ocasiones arrollador, pero abre tantos caminos para la reflexión que solo por eso merece la pena leerlo.

El hilo conductor de la novela es la planificación y ejecución de un timo. Como en El Golpe, hay un plan, un gancho, se recluta un equipo de especialistas, hay traiciones… Este guión un tanto estereotipado constituye un armazón sólido para la novela y da rienda suelta al autor para empezar a lanzarnos ideas  y reflexiones de gran calado. Es una elección brillante, porque al aficionado a la ciencia ficción habitualmente le atrae más el fondo que la forma (sé que esta generalización es discutible y me gustaría que habláramos sobre ello) y al escoger esta “plantilla”, tiene las manos libres para exponer otros elementos, posiblemente más de su interés.

La manipulación de la genética humana ha dado lugar a nuevos tipos de personas y en The Quantum Magician se nos presentan tres nuevas especies, muy diferentes entre sí pero todas intrínsecamente fallidas, al menos desde el punto de vista de “humano base”. El Homo eridanus está modificado para resistir presiones de cientos de atmósferas y por lo tanto su cuerpo apenas se asemeja a un Homo sapiens. Su ámbito de actividad se restringe a las profundidades abisales de las colonias espaciales y para desplazarse necesitan tanques especiales capaces de proveer esa presión. Y sin embargo, son quizá la raza menos truncada de los experimentos, porque tienen claro su rol y, culturalmente, aceptan su papel en el mundo.

Los Puppets, sin embargo, son harina de otro costal. Modificados por los Numen para que los consideraran dioses, sienten la compulsión genética de servir a sus divinidades. Estos autoproclamados seres divinos, veleidosos como eran, han dado lugar a una estructura social profundamente depravada, donde no está claro quién es esclavo de quién. Algunas escenas son realmente repulsivas, ya que esta relación malsana se ha ido pervirtiendo aún más conforme ha pasado el tiempo. La escasez de auténticos Numen hace que los Puppets sufran incluso síndrome de abstinencia y entren en éxtasis solo con revolcarse sobre las deposiciones de sus dioses. Estas escenas son realmente perturbadoras y dejan para la reflexión particular de cada uno el verdadero significado de la religión, en este caso impuesta mediante la manipulación genética, reducida a respuestas hormonales a estímulos predispuestos.

La última raza que conocemos es el Homo quantus, verdadero protagonista de la historia. Humanos con capacidades de computación cuántica que pueden entrar en un estado de fuga donde abandonan la subjetividad de su persona y se convierten en máquinas computacionales capaces de ver todas las posibilidades de la función de onda sin llegar a colapsarla. Estos seres forman una colonia ajena al resto de los mundos y dedican su vida y su tiempo al estudio del cosmos, pero quizá su propio aislamiento les impide acceder a la información que precisan para conseguir sus ambiciones.

El variopinto equipo que se conforma para llevar a cabo la misión tiene un poco de todo, como en botica. Por supuesto, hay al menos un miembro de cada una de estas nuevas especies que he mencionado, pero algunas de las interacciones más interesantes se producen con los “humanos base”. De nuevo, el contraste entre lo considerado “normal” y la “evolución” le da a Kunsken un espejo deformado en el que enfrentarnos a nuestros propios miedos, sobre todo el miedo a lo que es diferente, al extraño, al cambio.

Sin dejar de recurrir en ocasiones al humor, como en la escena de huida de la prisión, el autor nos plantea una obra seria y meditada, científicamente verosímil (al menos hasta donde yo entiendo) y exigente a la vez en la lectura.

Con estos mimbres, Derek Kunsken consigue hilvanar una historia tradicional en la forma pero rompedora en el fondo, lanzando ideas que no dejan descansar al lector en ningún momento. No digo que la novela sea perfecta, porque también existen algunos momentos en que la tecnojerga se apodera de la narración y puedes incluso comenzar a dudar de los derroteros por los que anda el libro, pero es una lectura más que recomendable para cualquier interesado en la ciencia ficción de ideas. Un autor al que sin duda habrá que seguir de cerca, al que algunos nombran ya como heredero espiritual del mejor Peter Watts.

Portada de Beneath the World, a Sea

Aquí os traigo la que será portada de la séptima novela de Chris Beckett, autor de Dark Eden. Llevará como título Beneath the World, a Sea y tiene prevista su publicación el 4 de abril del año que viene.

Esta es la sinopsis:

South America, 1990. Ben Ronson, a British police officer, arrives in a mysterious forest to investigate a spate of killings of a local species called the Duendes. They are silent, vaguely humanoid creatures – with long limbs and black button eyes – that have a strange psychic effect on people, exposing them to their suppressed thoughts and fears.

The crimes have taken place in a landscape known as the Delta and to reach it Ben has crossed the Zone, a territory which wipes the memories of all who pass through. He remembers nothing of the preceding days; what he did or felt or saw.

Ben is uneasy about what he may have done in the Zone and avoids opening the diaries he kept whilst there, busying himself with the investigation instead. He becomes fascinated by the Duendes, but the closer he gets, the more he begins to unravel. As the Delta starts to take hold of his mind, Ben becomes increasingly haunted by the unopened diaries and the terrible secrets they might hold…

Y aquí la traducción:

Sudamérica, 1990. Ben Robson, un oficial de policía británico, llega a un bosque misterioso para investigar una serie de muertes de una especie local llamada Los Duendes. Son criaturas silenciosas, vagamente humanas con miembros largos y ojos oscuros, que tienen un extraño efecto psíquico en la gente, exponiéndolos a sus pensamientos secretos y sus miedos.

Los crímenes han tenido lugar en un escenario conocido como el Delta y para llegar allí Ben ha cruzado la Zona, un territorio que borra las memorias de todo el que lo atraviesa. No recuerda nada de los días anteriores, ni lo que hizo ni lo que sintió ni lo que vio.

Ben está intranquilo sobre lo que ha podido hacer en la Zona y evita abrir los diarios que escribió mientras estaba allí, ocupándose en cambio de la investigación. Le fascinan los Duendes, pero cuando más se acerca, más cosas descubre. Conforme el Delta comienza a hacerse con su mente, Ben se obsesiona más con sus diarios sin abrir y los terribles secretos que puedan ocultar.

 

Death of a Clone

Hubo una edad de oro de la literatura detectivesca a principios del siglo pasado, liderada por la dama del crimen Agatha Christie. Y como otros muchos, yo tuve mi época de devorar este tipo de novelas. En las décadas posteriores la irrupción de la tecnología quitó parte de la gracia a los libros, que fueron tendiendo cada vez más a la parte menos reflexiva de la investigación.

Para volver a disfrutar de libros de este corte, son necesarias unas circunstancias especiales. Y, sorprendentemente, la ciencia ficción nos puede dar unos escenarios estupendos para crímenes de resolución incierta. Esto es porque una de las virtudes del género es la posibilidad de cambiar las reglas del juego. Por ejemplo, en Six Wakes de Mur Lafferty las víctimas del crimen son unos clones en una nave espacial, convirtiéndose en una vuelta de tuerca al típico caso de la habitación cerrada.

Death of a Clone toma una idea similar. En un remoto asteroide se sitúa una colonia minera explotada por clones bajo la supervisión de tres humanos “normales”. El trabajo debería estar repartido entre los cuatro grupos de seis clones idénticos según sus características particulares, pero al comienzo de la novela ya nos encontramos en una situación desequilibrada, porque solo quedan dos miembros de uno de los grupos. Y cuando aparece muerta una de ellas, la gemela restante decide investigar, basándonse en los libros de Poirot y Marple que ha devorado en su tiempo libre.

El punto de partida, resulta muy atractivo. Si los personajes son clones, ¿serán sus motivaciones iguales o habrá diferencias entre cada uno de ellos? ¿Qué papel representan los supervisores en el control del trabajo? Si han matado a un clon, ¿seguirán con el siguiente hasta acabar con la estirpe? Y ¿por qué no había veinticuatro clones desde un principio?

Estas son solo algunas de las preguntas que nos podemos hacer con el planteamiento inicial del libro, pero claro, no todo es lo que parece (¿dónde estaría el misterio si no?).

La idea, como digo, es buena, aunque la ejecución no tanto. La prosa del autor es en ocasiones demasiado plana para expresar los sentimientos que sin duda poseen los personajes. También tiene algunos problemas de ritmo mientras se está llevando a cabo la investigación, quizá achacables a la propia estructura de la novela, demasiado centrada en la estrecha visión de la protagonista. Se desaprovechan algunas oportunidades de exponer debates éticos que podrían ser muy interesantes, pero es posible que el autor no estuviera interesado tanto en este aspecto como en el propio desarrollo del misterio.

Los secretos del pasado que van surgiendo cumplen escrupulosamente su papel sorprendente y a la vez homenajean a sus referentes. Death of a Clone es una lectura corta y disfrutable. Siento interés por la siguiente obra de Alex Thomson, la verdad.

Ganadores de los premios Dragon 2018

Se han dado a conocer los ganadores de los premios Dragon. Son los siguientes:

Mejor novela de ciencia ficción

Artemis de Andy Weir

Mejor novela de fantasía

Oathbringer de Brandon Sanderson

Mejor novela juvenil

Children of Blood and Bone de Tomi Adeyemi

Mejor novela de ciencia ficción militar o fantástica

A Call to Vengeance de David Weber, Timothy Zahn, y Thomas Pope

Mejor novela de historia alternativa

Uncharted de Kevin J. Anderson y Sarah A. Hoyt

Mejor novela de franquicia

Leia: Princess of Alderaan de Claudia Gray

Mejor novela de terror

Sleeping Beauties de Stephen King y Owen King

Mejor cómic

Mighty Thor de Jason Aaron y James Harren, Marvel Comics

Mejor novela gráfica

Brandon Sanderson’s White Sand Volumen 1 de Brandon Sanderson, Rik Hoskin, y Julius M. Gopez, Dynamite Entertainment

Mejor serie de TV ciencia ficción o fantástica

Game of Thrones, HBO

Mejor película ciencia ficción o fantástica

Black Panther dirigida por Ryan Coogler

Mejor juego de consola o PC ciencia ficción o fantasía

Middle-earth: Shadow of War de Monolith Productions

Mejor juego de móvil ciencia ficción o fantasía

Harry Potter: Hogwarts Mystery de Jam City

Mejor juego de mesa ciencia ficción o fantasía

Red Dragon Inn 6: Villains deSlugfest Games

Best Science Fiction or Fantasy Miniatures / Collectible Card / Role-Playing Game

Mejor miniatura / juego de cartas coleccionable /  RPG ciencia ficción o fantasía

Magic: The Gathering Unstable de Wizards of the Coast

¡Enhorabuena a los ganadores!