Ya había leído algunos libros de Yume Kitasei, pero creo que Saltcrop es su obra más redonda hasta la fecha. Una novela situada en un futuro cercano con un tono ciertamente melancólico que dedica mucho tiempo a explicar la relación entre tres hermanas que han tenido sus más y sus menos, con una infancia difícil pero un también con un amor inquebrantable entre ellas.
Lo primero que destaca en la obra es la creación del mundo, ya que a la autora japonesa-americana describe una distopía muy sólida con pocas herramientas en principio. Conforme va avanzando la novela se irán descubriendo nuevos matices, pero el tono de resignación algo desolado transpira cada página. La plaga que acecha las magras cosechas, la necesidad de utilizar productos químicos al por mayor para conseguir algo con lo que alimentarse, rebuscar entre la basura para encontrar recuerdos vendibles de un pasado mejor… El tono de la novela viene marcado desde un principio y desde luego, no es una lectura que se haya de afrontar con pesadez en el corazón.
Los personajes están muy bien caracterizados. La relación entre las tres hermanas, dos presentes y una ausente pero que influye en las demás desde la distancia es hermosa e hiriente a la vez, ya que vemos el punto de vista de cada una y cómo las cosas que no se dicen pueden tener consecuencias con posterioridad. Es encomiable el juego de distintos puntos de vista, cómo se ve cada hermana a una misma y a las demás, completando un puzle que sin esas aportaciones hubiera quedado incompleto.
Saltcrop es también una novela de aventuras marítimas, aunque la parte del viaje esté un poco descompensada, quizá por la propia naturaleza de los viajes en barco, ya que tiene muchas partes de calma chicha aderezadas por picos de gran tensión. A veces creo que la inocencia de las hermanas es pavorosa, pero quizá sea una consecuencia lógica de una vida apartada del mundo, donde las interacciones sociales están restringidas a un grupo pequeño de personas.
El libro está claramente dividido en partes que, si bien no son estancas, si que delimitan de forma estricta la narración, con cambios de escenarios bien marcados. La crítica social a las grandes corporaciones está presente a lo largo de toda la historia, pero se va acrecentando conforme van pasando las páginas. Además, es una lucha fútil, ya que por más que van descubriendo y consiguiendo avances, al final todo parece destinado al mismo sino que Sísifo.
Si os llama la atención una distopía ecológica, con su poco de misterio, viaje y crítica social, con una atmósfera opresiva por momentos, este es vuestro libro sin duda alguna.
