Venta del relato “Days of the War, as Red as Oxblood, as Dark as Bile” de Aliette de Bodard

Aliette nos informa en su blog que ha vendido el relato “Days of the War, as Red as Oxblood, as Dark as Bile” a Subterranean Online así que en alguna próxima entrega del magazine podremos volver a disfrutar de esta autora.

El relato se sitúa en su universo Xuya, un tiempo después de la multipremiada On a Red Station, Drifting, incluso con algún personaje de esta historia. Esperemos que no se retrase mucho su publicación.

Liebster Award

liebsterResulta que siempre he pensado que escribo para mí misma y para mi familia, pero sorprendentemente hay alguien más que encuentra interesantes mis post y es nada más y nada menos que Eduardo Vaquerizo. El autor de “La última noche de Hipatia” ha tenido a bien otorgarme el Liebster Award, pero he de cumplir una serie de requisitos para ser merecedora de tal galardón.

A) Nombrar y agradecer el premio a la persona o blog que te lo concedió.
B) Responder a las 11 preguntas que te hayan formulado.
C) Conceder el premio a 11 blogs y proponerles 11 preguntas para responder.
D) Visitar los blogs que han sido premiados junto con el tuyo.
E) Informar a los blogueros de su premio.

Yo diría que el punto A) ya lo he cumplido, así que pasemos sin más dilación al B).

1) ¿Por qué un blog?

Básicamente, porque me convenció mi amigo @trecebits, que creyó que tenía “potencial”. El potencial todavía lo andamos buscando pero el blog ya está aquí.


2) ¿Necesita tu blog un blurb?

Tiene uno, pero es tan genérico que no le vendrían mal nuevas ideas. Lo mismo hago un concurso  o se lo encargo a @odo.


3) ¿Lees habitualmente?

Sí, yo diría que más que habitualmente constantemente. Y no leo más porque no me dejan, no por falta de ganas. Eso de comer y dormir quita mucho tiempo.


4) ¿Crees que la moda de los blogs ha pasado, se ha asentado, es algo destinado a desaparecer?

No lo tengo muy claro, antes tenían más vidilla, pero mientras siga entrando sangre nueva seguirán existiendo.

5) ¿Cada cuánto tiempo actualizas el blog?

Intenté comprometerme a hacerlo una vez en semana, pero me pico y lo hago más a menudo. A veces, diariamente.


6) ¿Te preocuparía que nadie visitara tu blog?

Mejor que no me preocupe, porque realmente no viene casi nadie.


7) ¿Qué contenidos consideras importantes para merecer salir en tu blog?

Las reseñas de libros que leo y las entrevistas me parecen lo más interesante, pero lo que más tirón tiene con diferencia son los libros gratis.


8) ¿Es este nuevo tipo de premios, los víricos, útiles?

Pues no sé, pero entretenidos sí que son.


9) ¿Prefieres alternativas como Facebook o Twitter a un blog?

Creo que persiguen objetivos distintos. Unos pueden ser un espacio para la reflexión, otros para la inmediatez y otros… otros para las fotos de comidas.


10) ¿Cuánto tiempo llevas conectado/a?

Usando internet desde 1997. Con el blog, no llega al año.


11) ¿No son once preguntas y once blogs a nominar muchos?

Un montón. No sé si se me ocurrirán tantos.

Los blogs a los que propongo para el premio son:

Sense of wonder

Más ficción que ciencia

La biblioteca de Ilium

Deprisa, deprisa

El almohadón de plumas

Lee más libros

Voracilector

Mis comics y mas

El lector impaciente

Trecebits

Aliette de Bodard

Y aquí, las preguntas:

1) ¿Por qué un blog?
2) ¿Lees habitualmente?
3) ¿En cuántos idiomas lees?
4) ¿Libros electrónicos o en papel?
5) ¿Cada cuánto tiempo actualizas el blog?
6) ¿Cuántas visitas tienes de media?
7) ¿Qué contenidos consideras importantes para merecer salir en tu blog?
8) ¿Es este nuevo tipo de premios, los víricos, útiles?
9) ¿Prefieres alternativas como Facebook o Twitter a un blog?
10) ¿Cuánto tiempo llevas conectado/a?
11) ¿No son once preguntas y once blogs a nominar muchos?

¿Hasta dónde llegarán los Liebster?

WW2.2 Secret Service

secretserviceMe alegro de haber perseverado en la lectura de esta serie de comics, ya que aunque la primera entrega no era muy prometedora, las siguientes están mereciendo la pena.

En este caso solo con el título, Secret Service ya sabemos que nos vamos a encontrar un juego de desinformación entre las distintas potencias enfrentadas en la guerra. Aunque, como buena historia alternativa, los equilibrios de poder son distintos de los que conocemos. La Alemania nazi sigue aliada con los comunistas rusos, EE.UU. todavía no ha entrado en guerra de forma definitiva…

En el Reino Unido sospechan de la presencia de infiltrados en sus servicios secretos (MI5 y MI6), ya que los bombardeos sobre su territorio son cada vez más certeros. Como medida desesperada, Churchill envía a su mejor analista (X) a terreno ruso con una máquina Enigma, pero lo que no se espera es que X tenga sus propios planes.

La trama es bastante compleja y parece resuelta de forma un poco apresurada para ceñirse al formato de álbum europeo. No obstante, una segunda lectura nos permite apreciar mejor el complejo mecanismo de relojería que Mathieu Gabella nos expone, si bien es cierto que hay que tener algún que otro conocimiento sobre el espionaje en la Segunda Guerra Mundial para disfrutar por completo de la historia, como ese giño en la última viñeta del tebeo.

El guionista también aprovecha para que veamos algunas pinceladas de las purgas estalinistas y de cómo el poder en el NKVD estaba basado en la acumulación de información sensible sobre todo hijo de vecino para su uso en extorsiones en el momento oportuno. Una pena que la Abwehr solo salga mencionada de pasada.

En el apartado gráfico Vicent Cara cumple con su tarea pero sin florituras, salvo algún plano cenital muy conseguido el resto de los dibujos son funcionales pero algo fríos.

Pronto comentaré el siguiente tomo de W.W.2.2 sobre la figura del francotirador ruso Vasili Záitsev.

Entrevista a T.L. Evans

DSC00136Hace unos días reseñamos “Strings on a shadow puppet” y su autor nos ha concedido una interesantísima entrevista que os ofrecemos a continuación. Puedes leer esta entrevista en inglés.

¿Cuándo supiste que querías ser escritor?

Siempre me han gustado las historias, especialmente la ficción especulativa (ciencia ficción, fantasía y demás), pero realmente empecé a escribir a los 12. En ese momento descubrí a Tolkien, que realmente despertó mi imaginación. Escribí una horrible aventura fantástica basada en las leyendas artúricas que todavía tengo guardada en alguna caja perdida y seguí escribiendo desde entonces.

Sin embargo, en la universidad tuve que elegir: ¿ser escritor o antropólogo? Entonces decidí escoger el camino de la Antropología – Arqueología porque pensé que me podría ganar la vida y siempre tendría un hueco para escribir. Por supuesto, no me di cuenta ni de lo masificada que estaría la profesión académica en las siguientes décadas ni de lo poco que se puede escribir cuando se vive en tiendas de campaña y moteles por todo el mundo. Así que, durante años, la escritura fue un hobby al que me dedicaba ocasionalmente, mientras ayudaba a algunos autores realmente talentosos a crear y profundizar en sus mundos fantásticos.

Después de finalizar mi doctorado, y durante el proceso de fundación del departamento de Geomática en Arqueología en Oxford, volví a dedicar más tiempo a la escritura. Lo hice para aliviar el estrés, para ser honesto, pero lo que ayudó a que me lo tomara más en serio fue el reciente éxito de Alastair Reynolds que me hizo pensar: “quizá un investigador serio también puede ser publicado”.

Así que, mientras publicaba dos libros académicos y unos cuantos artículos realmente aburridos, empecé a escribir lo que acabaría siendo “Strings on a Shadow Puppet”. Por supuesto, lo que escribí necesitó una gran dedicación para convertirse en lo que realmente publiqué, y el punto de inflexión fue cuando me mudé a Oregón y coincidí con un maravilloso grupo de escritores llamado Wordos. Así es como convertí un libro que tenía potencial en una novela para publicar.

¿Qué otros autores te han influído?

Bueno, gracias a Tolkien me dí cuenta de que se puede crear un mundo con lógica interna pero que no necesita utilizar metáforas modernas. Tolkien nunca se refiere a cosas de nuestro mundo en sus libros, solo cosas de su mundo. Eso tuvo un gran impacto en la creación de mis mundos.

Aún así, el primer autor que me enamoró, el que probablemente haya tenido un impacto estructural más profundo en mí, fue Sir Arthur Conan Doyle y su famosa creación Sherlock Holmes. De niño devoré todos sus libros y todavía recuerdo lecturas conjuntas de sus misterios con mis padres por orden de publicación. El impacto es patente en mis libros, creo. Misterios, intriga y demás, obviamente representan un papel importante en mi novela y realmente estas influencias se remontan a Doyle. Lo que es más, él nunca, o casi nunca, hacía trampas en sus misterios. Todas las pistas estaban en el texto, no había información oculta y eso es lo que trato de hacer en mis libros; esconder la verdad en las palabras, no en su ausencia.

Otra influencia, quizá más grande es John LeCarré. Lo conocí literariamente en mi juventud y sus historias oscuras y moralmente ambiguas de espionaje en la Guerra Fría atraparon mi imaginación. Esto fue al principio de los ochenta del siglo pasado y el realismo sucio de sus libros probablemente se muestra en mi trabajo.

Por supuesto mis libros no muestran el conocimiento implícito del tema del que él hace gala. No solo porque están situados en un futuro de ciencia ficción, si no porque no tengo tanto tiempo para bucear en archivos y demás. A pesar de esto, gran parte de mi inspiración proviene de LeCarré y del mundo gris en el que se desarrollan sus historias de espías.

Ninguno de estos autores lo son de ciencia ficción y, sobre este extremo, debería mencionar a Robert Heinlein, Gene Roddenberry y en cierto sentido a George Lucas. Heinlein es el padre de la ciencia ficción militarista y sus comentarios velados, que tan a menudo se ignoran en sus primeros trabajos, están realmente colocados de forma inteligente. Lucas me hizo ver un futuro valiente y Roddenberry… Star Trek  permanece asentada profundamente en mi memoria desde la infancia y creó mi visión de la ciencia ficción, por lo tanto, todavía admiro a Star Trek de una forma que no puedo explicar.

Y por supuesto, por supuesto, están los Wordos, el grupo de escritura del que afortunadamente formo parte en los últimos años. Jerry Oltion, Nina Hoffman y otros muchos del grupo han influído profundamente en mi estilo y mi habilidad. Supongo que soy parte del legado de Damien Knight y Kate Wilhelm.

¿Hay algún escritor actual al que admires?

Puede parecer gracioso, considerando que soy un escritor de género, pero me encanta el trabajo de Carlos Ruiz Zafón. Crea personajes que son tan atractivos que no quiero que sus libros acaben. Terminar una de sus novelas es como mudarse a otro país y dejar atrás amigos a los que nunca volverás a ver.

De forma similar, Umberto Eco es maravilloso. Sus escritos me enseñaron que se puede crear una historia que se puede leer en niveles diferentes. Cuando está en su mejor nivel, sus libros permiten al lector introducirse en estos niveles tan profundamente como desee. ¿Quieres una aventura o un misterio? Lee el libro es su nivel superficial. ¿Quieres comentarios sociales o espirituales? Bucea un poco más y encontrarás simbolismos entre las palabras. No puedo decir que yo lo haya conseguido, pero es algo por lo que lucho.

Y dentro de mi propio género: me encantan el trabajo de Alastair Reynolds, que como ya he dicho es un poco mi héroe personal. Después de todo, cambió de ser un investigador profesional a ser un autor y de esta forma me dio el coraje necesario para lanzarme al mundo editorial actual.

Por supuesto, también hay que tener en cuenta al gran Iain M. Banks, cuyas obras revitalizaron grandes espacios de la ciencia ficción, probando que se puede escribir tales historias en un estilo literario.

Ambos han hecho maravillas con el género space opera. Lo han abierto al comentario social más vanguardista. Si no hubiera sido por ellos y por sus editoriales, gran parte de la mejor ciencia ficción actual no existiría.

Ursula K. Le Guin también sigue escribiendo y es magnífica. Su trabajo siempre ha sido inspirador para mí. Escribe sobre gente, cultura e ideas de una forma que despertó al antropólogo en mí desde muy temprana edad. No solo sus conceptos e imaginería son fuertes, si no que el flujo de su lenguaje es admirable.

Recientemente, también me ha impresionado mi compañero indie Hugh Howey con su serie Silo. Personalmente, solo he leído el Wool Omnibus, pero fue muy inspirador y estoy ansioso por leer el resto de la serie.

Oh… hay tantos que podría llenar páginas y páginas con la lista. Estos son los que se me han ocurrido.

¿Cómo te documentas? ¿Dónde buscas la inspiración?

Mi documentación varía, dependiendo de lo que necesito en cada momento. Para ciencias biológicas, tengo un gran recurso en mi mujer, que es doctora en Medicina y tiene un doctorado en bioquímica de Oxford. La física, la astrofísica y demás son mi hobby, aunque a un nivel muy amateur. Me encantó “A Brief History of Time (Illustrated edition)”, de Stephen Hawking, que me resultó muy interesante. Por supuesto, para cualquier tema realmente profundo pregunto a uno de mis colegas o mis amigos de mis días en Oxford.

En el aspecto militar y de inteligencia, tengo varios amigos que me han ayudado con ello. Haber vivido en el extranjero durante mucho tiempo en muchos lugares te permite conocer a mucha gente, especialmente cuando se es arqueólogo, pero para ser honesto, mucho viene de mi padre. Él era historiador, pero antes de ser profesor trabajó para el Departamento de Estado de EE.UU. Como tal, tenía un percepción muy interesante del mundo de las relaciones internacionales, incluso del trabajo de inteligencia. Además, estos temas formaban el núcleo de las conversaciones en la cena, mientras crecía.

En cuanto a la inspiración, la encuentro casi en todos sitios. Algunos hechos como el trágico incidente con USS Vincennes y Iran Air Flight 655, el conflicto colombiano actual o las luchas en África y en los países árabes probablemente se muestran a lo largo de mi libro.

En un nivel más filosófico, sin embargo, “Strings on a Shadow Puppet” y el resto de la serie The Ripper’s Raiders son una mirada a conceptos como la democracia, los derechos humanos y la seguridad personal. Si lees mucha ciencia ficción pensarás que el American Way of Life es la evolución natural de la humanidad, pero creo que incluso para los propios estadounidenses no siempre significa lo mismo, aunque usen el mismo término, incluso en algo tan básico como la democracia. Otras culturas aplican un rango más amplio en sus definiciones.

Lo que es más, en occidente tendemos a adorar la individualidad por encima de todo lo demás,  pero esto no es así en otras culturas. Incluso nuestras propias culturas no son siempre así. Creo que sería interesante examinar estos conceptos, y ¿qué mejor manera de hacerlo que en una aventura de ciencia ficción?

Por supuesto, aparte de los comentarios políticos y filosóficos, estoy escribiendo historias sobre gente, basadas en gente. Para conseguirlo, primero encuentro gente que me interese y luego escribo una historia a su alrededor.

¿Por qué empezaste a escribir tu blog? ¿Cómo escogiste el nombre?

ArcheologistPara ser honesto, comencé mi blog (The Archaeologists’ Guide to the Galaxy) como una plataforma de marketing, una manera de que mi nombre fuera reconocido de forma que pudiera vender mis libros. Sin embargo, de una forma bastante rápido cobró vida propia. Por alguna razón se volvió bastante exitoso, mayoritariamente debido a la buena suerte y ahora siento la responsabilidad para con mis lectores de mantenerlo.

Después, tras el nacimiento de mi hijo, se volvió una parte importante de mi vida. Como cualquiera que tenga hijos entenderá, una vez que mi hijo llegó me encontré sin tiempo para escribir historias, por no mencionar novelas. En vez de eso, puse mis energías intelectuales y creativas en las reseñas de libros. Ayudó a que no me volviera loco. Desde ahí empezó a crecer aceleradamente, especialmente desde hace un año, cuando las visitas aumentaron mucho.

El nombre del blog vino casi inmediatamente. Siempre me gustó la serie de Douglas Adams Hitchhikers Guide to the Galaxy , especialmente el serial radiofónico de la BBC de los 80. Tras haber pasado 25 años como arqueólogo profesional pensé que sería una locura no usarlo para distinguirme de la multitud, así que el título vino por sí solo.

¿Tus conocimientos arqueológicos te ayudan en tus libros?

Sí, muchísimo. En primer lugar, quiero resaltar que fui arqueólogo profesional durante 25 años antes de empezar a escribir seriamente. Eso es mucho tiempo y me dio una perspectiva real de culturas diferentes, de la Historia e de las interacciones humanas.

También me dio una visión a largo plazo de la humanidad, ayudó a darme cuenta de que las culturas cambian constantemente y que, a pesar de lo que la gente suele pensar, los desarrollos tecnológicos vienen en saltos y comienzos. En ciencia ficción frecuentemente proyectamos cambios tecnológicos como un flujo incremental, pero no tenemos en cuenta los cambios reales es nuestros puntos de vista políticos o filosóficos. Y así no es como ocurre a largo plazo.

Si me preguntas, la tecnología cambia a acelerones y ahora mismo nos encontramos en uno que empezó con la revolución industrial. Sospecho que estos cambios se ralentizarán en algún momento y entraremos en un largo periodo de barbecho, aunque no sabría decir cuándo.

En el aspecto cultural, sin embargo, la mayoría de la ciencia ficción predice un movimiento hacia una América pangaláctica donde todo el mundo habla inglés. Aunque hay claras analogías con el presente en el mundo que he creado, intento no asumir estos principios. Como resultado, la democracia es una opción política en mi mundo, pero ni es la única ni es la dominante.

Más aún, mi pasado arqueológico me da inspiración desde diferentes culturas. Miro a culturas actuales o pasadas y las cambio para mis propósitos. Un poco, para civilizaciones humanas futuras, y mucho, para culturas alienígenas.

Aún diría más: creo que el mayor impacto que la arqueología ha tenido en mis libros es la experiencia de vivir en un grupo pequeño con gente altamente especializada en condiciones aisladas durante largos periodos de tiempo. Supongo que eso es de lo que van mis historias en realidad, no tanto los comentarios sociales y políticos sino las relaciones personales entre individuos que viven circunstancias extremas.

SubacuaticaSé que hiciste arqueología subacuática, ¿te ayudó a limpiar tu mente y concentrarte en lo que quieres conseguir?

Cualquier tipo de arqueología haces eso. Existe un cierto Zen en la arqueología, principalmente cuando estás en las fases iniciales de las búsquedas. En estos casos, especialmente en los que se realizan en América del Norte, lo que haces es excavar durante semanas sin encontrar nada. Una vez calculé que había excavado un kilómetro cúbico de suciedad estéril… agujeros sin nada. Por supuesto, también he excavado en algunos de los mejores sitios imaginables: pirámides mejicanas, enterramientos célticos, sitios iroqueses en el lugar de nacimiento de la legendaria nación Seneca; lugares maravillosos. Estos ayudaron a mi carrera arqueológica, pero fueron esas millas y millas de nada las que me ayudaron con mis escritos. Pasaba días y días encontrando NCM (no cultural material), dejando mi imaginación vagar mientras que me concentraba en la tarea.

¿Las redes sociales son importantes para tus relaciones con otros autores y con tus lectores?

Sí. Hoy en día las redes sociales son importantes para todo. Son claves para darte a conocer como autor. Con mi propio blog he conseguido darme a conocer a algunos escritores de renombre en el género, pero el factor más importante de los blogs – facebook, twitter y demás- es promover mi nombre y mi trabajo, y los más importantes blogs como el tuyo son de los más importantes.

¿Quieres que la gente sepa acerca de mis libros?  Haz que los lean y escriban sobre ellos. Mucho mejor que cualquier anuncio. En este época tecnológica, donde cualquier idiota puede auto-publicarse, los blogs que reseñan libros son los guardianes. Hacen el trabajo que los editores solían hacer (y que, para ser justos, siguen haciendo) especialmente con los libros auto-publicados.

¿Por qué decidiste auto-publicarte?

Para ser honesto, dudaba. Había mandado la novela a un par de editoriales grandes y parecer ser que su mezcla de géneros era un problema. Estaba pensando en seguir con la lista de editoriales, como hace la mayoría de la gente, pero muchos de los grandes autores que conozco, aquellos que ya han firmado por TOR, ACE o BAEN, me sugirieron que probara a hacerme Indie (Independent Publishing, el nombre guay en inglés para los que se auto-publican). Estos autores me hicieron ver que la gente estaba teniendo mucho éxito y que las editoriales tradicionales tenían serias reservas hacia los trabajos que mezclaban géneros (no estoy seguro de que mi novela sea así, pero así la llamaban) Así que seguí su consejo y aquí estoy.

¿Qué puedes decirnos sobre Wordos?

Wordos es un grupo de escritura asombroso en Eugene, Oregon (EE.UU.). Fui lo suficientemente afortunado como para unirme a ellos cuando estaba revisando mi novela. Se centra en ficción especulativa (ciencia ficción, fantasía, horror y demás), especialente en formato corto y cuenta con varios escritores premiados. Sigue una guía muy estricta en los procesos de revisión y hay un gran número de escritores de renombre muy respetados que van a los talleres para compartir su visión y experiencia con los demás. Gente como Jerry Oltion, Nina Hoffman, Jay Lake y algunos más son miembros que acuden o han acudido de forma regular.

La verdadera fuerza del grupo, de todas formas, no son los autores conocidos y los premiados, sino el formato que se sigue. Después de todo, muchos de los miembros no son ganadores de premios sino escritores noveles y algunas veces son sus puntos de vista los que aportan más a una historia.

Wordos se reúne todas las semanas y los miembros se apuntan para mandar historias a  revisión. Se da oportunidad a todo el mundo, y de hecho, todos tienen que enviar al menos dos o tres historias para que se les permite ser miembro de pleno derecho del grupo. Antes de que puedas mandar nada debes escuchar una reseña de una historia que has leído y comentar las historias de otra gente durante dos semanas. Solo entonces puedes mandar tus historias (preferiblemente una después de la otra). Una vez hecho esto, si todavía tienes estómago para volver, se te acepta como miembro del grupo (sin importar lo buenas que sean tus historias). El formato que seguimos está basado en la escuela de crítica Clarion y no permite el comentario personal o las comparaciones. Los escritores no pueden comentar, preguntar o justificar nada durante el proceso de revisión, pero pueden pedir aclaraciones al final.

Esto funciona muy bien y construye una relación de trabajo muy buena, limitando los problemas personales  que he visto surgir en otros grupos. Su web tiene información muy interesante.

¿Se ha puesto en contacto contigo alguna editorial española para traducir tu libro?

No, pero estoy muy interesado, o incluso en llegar a un acuerdo con un traductor independiente. Siempre he pensado que este libro en particular se vendería bien en el mercado hispanohablante, en España y Sudamérica. Después de todo, gran parte del libro fue inspirado por la situación política actual y los conflictos armados en Sudamérica, así como en Irlanda, África y Asia.

¿Puedes explicarnos por qué decidiste retrasar la fecha de lanzamiento de tu libro?

Ah. Sí. Es una historia muy triste.

Lo tenía todo preparado para lanzar mi libro justo antes de Navidad del año pasado cuando ocurrió una tragedia absoluta en Sandy Hook, Connecticut. Un hombre de veinte años entró en una escuela de primaria y comenzó a disparar indiscriminadamente. Murieron 28 perosonas, sin incluir al propio asesino, 21 fueron niños entre seis y siete años.

Como ya sabes, la primera escena de mi libro incluye la explosión de una bomba en una escuela. Cuando lo escribí, pensé que era la peor cosa imaginable y que me había pasado un poco. Pero resultó ser demasiado parecido a la realidad.

Publicar una historia con ese comienzo en ese momento hubiera sido poco respetuoso, pero además resulta que tengo una relación personal con Sandy Hook. Hace unos 12 años, le pedí matrimonio a mi mujer allí. En ese sitio tuvo lugar mi fiesta de compromiso. Demonios, mi sobrino iba a esa escuela.

Incluso si no hubiera tenido ese lazo personal con la ciudad, hubiera sido de mal gusto lanzar mis libro justo tras las muertes. Así que lo paré durante dos meses. Incluso me pareció demasiado pronto, pero sospecho que siempre me lo parecerá.

Creo que fue una muy buena idea llevar a cabo un concurso para decidir cuál sería la portada de tu libro, ¿tienes pensado hacerlo otra vez?

Tengo mis dudas sobre eso. El éxito fue tan grande la última vez que me tienta a seguir con Kevin Klakouski, el ganador de la competición. Kevin tiene mucho talento, es hábil y resulta muy divertido trabajar con él. Aporta su propia visión al proyecto pero permite que haya cambios. Le interesa más producir un trabajo de calidad que cumpla lo que se le pide que solo crear su visión artística. Su propia obra, sin inspirarse en nada más que en sí mismo, ya es muy bueno de por sí. Quizá es por esto por lo que es capaz de renunciar a su ego y crear lo que otros necesitan.

A pesar de esto, el concurso funcionó y el resultado fue lo que el también escritor Jacob Boyd define como “Crazy Good cover art”. Además, me encanta la idea de dar proyección internacional a artistas nuevos. Realmente fue muy interesante tener acceso a todas estas visiones e ideas presentadas al concurso. Hacerlo otra vez sería muy divertido. Ya veremos. Falta un año para publicación del siguiente libro.

¿Qué puedes decirnos de tus nuevos proyectos? ¿Va a existir la Encyclopedia Sophynensis?

Ahora mismo estoy trabajando en “The Traitor’s Gambit”, algo parecido a una secuela de mi primera novela. Continúa la historia de algunos de los personajes principales, explorando en detalle sus motivaciones y avanzando sus historias personales. Por supuesto, escribí “Strings on a Shadow Puppet” para que se pudiera leer de forma independiente y tiene su propia conclusión, de modo que la secuela se construye sobre esa base, respondiendo a algunos de los cabos sueltos del final del libro y dando lugar a nuevas historias.

Curiosamente, tengo borradores bastante avanzados de los libros tres y cuatro esperándome. Pero antes de eso, tengo que escribir el libro dos porque, mientras editaba “Strings on a Shadow Puppet” tuve que dejar fuera ciertos temas para aumentar la tensión (no puedo decir más sin spoilers, pero seguro que sabes a qué me refiero). Ahora necesito cerrar los arcos argumentales de estos personajes antes de que empiece el tercer libro.

Así que, una vez que publique “The Traitor’s Gambit”, tardaré bastente menos en terminar los siguientes libros. Aún así, todos son autoconclusivos. No habrá cliffhangers durante seis o siete años como hacen otros autores… o eso creo ahora.

Sobre la Encyclopedia Sophynensis, ya existe, pero como un borrador. La he escrito como una suerte de guía de continuidad, un libro de referencia para asegurarme de que no cambio nada de un libro a otro. Compilarlo para su publicación es un tema muy distinto. Necesitaría mucho esfuerzo que prefiero dedicar a escribir las historias que describe.

Cuando acabe la serie o al menos cuando esté más avanzada, me gustaría sacarla como guía. De momento, seguiré centrándome en las novelas. Aún es más, pretendo incluir un glosario en los libros siguientes y en la segunda edición de “Strings on a Shadow Puppet” para explicar algunos de los términos militares o específicos del mundo que utilizo.

Queremos reiterar nuestro agradecimiento a T.L. Evans por su amabilidad al responder a nuestras preguntas. No dejéis de leer su libro “Strings on a shadow puppet”.

Interview with T.L. Evans

DSC00136Recently, we reviewed “Strings on a shadow puppet”. His author has answered our questions in this interesting interview. You can also read it in Spanish.
When did you know you wanted to become a writer?
I always loved stories, particularly speculative fiction (Science fiction, Fantasy and the like), but I really started writing myself at the age of about twelve.  That was when I really discovered Tolkien, who really sparked some imagination in me.  I wrote this awful fantasy adventure tale based on the Arthurian legends which I still have floating around in a box somewhere, and I kept writing there after.
Somewhere in University, though, I had to make a choice: Writer or Anthropologist? At that point I decided I’d go down the Anthropology-Archaeology route because I thought it was more likely to provide a paycheck and that I could always write stories on the side.  Of course, little did I realize how over-populated the academic profession would become over the following decades, nor how little writing one can do when one is living in tents and motels around the world.  So for years I left writing as a hobby that I occasionally dipped into, occasionally helping out a few really talented authors in creating or fleshing out their fantasy worlds.
Then, sometime after I had finished my Doctorate and was in the process of building the Geomatics Department at Oxford Archaeology, I turned more fully back to writing.  I did it to relieve stress, to be honest, but what really made me look more seriously at it was the recent success of Alastair Reynolds that made me think: perhaps a serious researcher could also get published.
So, while publishing two academic books and a few really boring articles, I started writing what eventually became “Strings on a Shadow Puppet”.  Of course, what I wrote took a lot of work to turn into what I eventually published, and the turning point, really was when I moved to Oregon and joined a wonderful writers group called the Wordos. That is when I turned a book that had some potential into the novel that I eventually published.
Which other authors have influenced you?
 
Well, Tolkien introduced me to the concept that you could create a totally self-contained world that has internal logic but doesn’t require you to use modern metaphor.  Tolkien never refers to things from this world in his books, only things from his own.  That had a huge impact on my world building.
Yet the first author I loved, the one who probably had the deepest structural impact on me, was Sir Arthur Conan Doyle and his most famous creation, Sherlock Holmes. As a kid I devoured these and I still remember read-alongs with my parents where we would sit in the living room reading his mysteries in order of publication.  The impact of that is pretty clear in my books, I think.  Mysteries, intrigue and the like obviously play a big part of my novel, and I really trace it back to him. What is more, he never, or at least he seldom, cheated in his mysteries.  All the clues where in his text, he had no hidden information and that’s what I try to do in my books; hide the truth in the words, not in their absence.
Another, probably greater influence on me is John LeCarré.  I came across him in my teen years and his dark, morally ambiguous tales of Cold War espionage really caught my imagination.  Those were the early to mid 1980’s, and the total gritty realism of his books probably shows through shows through in my work.
Of course my books do not show the real tradecraft of his novels.  Not only are they are set in a Sci-Fi Future, but there is not quite as much time spent looking through files and such. Even so, a good deal of my  inspiration comes from LeCarré and the grey world that his spy stories set.
None of these guys are Science Fiction writer though, and to that end, I really would be amiss if I didn’t mention Robert Heinlein, Gene Roddenberry or in a sense George Lucas.  Heinlein is really the father of Military Science Fiction, and his veiled commentary that is so often overlooked when reading his early works is really quite cunningly placed.  Lucas gave me a feel for a gritty future, and Roddenberry… well the original series of Star Trek lies deep in my early memories, and created my view of Sci Fi and to that end, I still love Star Trek in a way that I can’t fully explain.
And, of course, of course, there are the Wordos, the writing group I have been lucky enough to have been a part of for the past few years.  Jerry Oltion, Nina Hoffman, and so many others in that group have deeply influenced my style and ability. To that end, I suppose I am part of the legacy of Damien Knight and Kate Wilhelm.
 
Is there any current writer that you admire?
It may sound a bit funny considering that I am really a genre writer, but I love the work of Carlos Ruiz Zafón.  He creates characters that are so appealing that I just don’t want his books to end.  Putting down one of his novels is like moving countries and leaving behind friends you will never see again.
Similarly, Umberto Eco is just marvelous. It was his writing that showed me that you could really layer a story in a way that they could be read on different levels.  When he is at his best, his writing allows the reader to dip just as deep into those layers as the reader wants.  You want an adventure or mystery tale?  Read the book on its face level.  You want social or spiritual commentary?  Delve a bit deeper and you will find symbolism between the words.  I can’t say I’ve managed to accomplish that, but its something I strive for.
As for within my own genres: I love the work of Alastair Reynolds, who as I mentioned is a bit of a personal hero to me.  After all, he moved from being a professional researcher to being an author and to that end gave me some of the courage it’s taken to throw myself into the actual publishing world.
Of course, there is also the late great Iain M. Banks, whose works really revitalized large canvas Science Fiction, proving that one could write such works in a literary style.
Both of them in particular have done wonders for space opera genre.  They have opened it up to more cutting social commentary.  Had it not been for them, and their courageous publishers, a huge amount of the best Sci Fi being produced now might now be around.
Of course, Ursula K. Le Guin is also still writing and she is just marvelous. Her work has always been inspirational to me.  She writes about people, cultures and ideas in a way that really sparked the anthropologist in me from an early age. Not only are her concepts and imagery strong, but her flow of language is something to be truly admired.
Recently, I have also become quite impressed with my fellow Indie Author, Hugh Howey and his Silo series.  Personally, I’ve only read the Wool Omnibus so far, but it was truly inspiring and I am anxious to read the rest in his series.
Oh… there are so many I could fill this whole article with that list. Those are the ones who came immediately to mind.
How do you do your research? Where do you search for inspiration?
 
My research varies, based upon what I need.  For biological sciences I have a huge resource in my wife, who is an MD and has a Doctorate in Biochemistry from Oxford.  Physics, astrophysics and the like are a bit of a hobby of mine, albeit on a very amateur level. I loved Stephen Hawking‘s A Brief History of Time (Illustrated edition), which was very very interesting.  Of course, for anything really deep I contact one of my colleagues or my friends from my Oxford days.
As for the military and intelligence side of things, I’ve had a few friends in the services who have helped me out with that.  Having been an Expat for a long time in numerous countries, one meets a fairly wide range of people, particularly when one is an Archaeologist, but to be honest, much of it comes from having had my father as a father.  He was a Historian, but before he became a Professor, he worked for the U.S. State Department.  As such he had very interesting insights into the world of international relations, including intelligence work.  Indeed, those sorts of topics formed the core of dinner conversations growing up.
Inspiration-wise, there is inspiration most everywhere. Some events like say the tragic incident with the USS Vincennes and Iran Air Flight 655, the present day Colombian conflict or the struggles going on in Africa and the Arab speaking world probably show through in this book.
On a more philosophical level, however, “Strings on a Shadow Puppet” and the rest of The Ripper’s Raiders series really is just a look at concepts of democracy, human rights, and personal security.  If you read a lot of modern Science Fiction you would think that the American Way of Life is the natural evolutionary outcome for humanity, but I find even within the US people don’t always mean the same thing when they use that term, or even something more basic, like democracy.  Other cultures have even greater range in their definitions.
What is more, in the West as whole we tend to worship individuality above and beyond all else, but not every culture feels that way. Even our own cultures didn’t always feel that way. I thought it would be interesting to examine those concepts, and what better way than doing it in a Science Fiction adventure?
Of course, political and philosophical commentary aside, I am really writing stories about people: character driven stories. To that end, I first find people who interest me and work a story around them.
Why did you begin writing your blog? How did you choose the name?
Archeologist
To be totally truthful, I began my blog (the Archaeologists’ Guide to the Galaxy) as a marketing platform – a way to get my name recognized so I could sell my books.  Pretty quickly, however, it took on a life of its own.  For whatever reason, it became quite successful, mostly due to good luck, and I now feel a responsibility to my readers to keep it up.
Then, after the birth of my son, it became a really important part of my life all on its own.  As anyone who has kids would understand, once my son was born I found I just didn’t  have enough time to write stories, not to mention novels. Instead, I put a lot of my creative and intellectual energies into book reviews.  That really helped my brain to stop becoming tapioca.  From there it sky rocketed, particularly about this time last year when my numbers leapt through the roof.
The site’s name, however, came almost immediately.  I have always loved Douglas Adams’ Hitchhikers Guide to the Galaxy series, particularly the BBC audiodrama that aired in the ’80s.  Having spent twenty-five years as a professional archaeologist, I thought it crazy to not use that in distinguishing myself from the crowd, so the title came by itself.
Does your background as an archeologist help you with the books?
 
Yes, tremendously. First of all, I should probably note that I was a professional archaeologist for twenty-five years before I turned seriously to writing.  That’s a long time, and it gave me a real perspective on different cultures, history and human interaction.
It also gave me a long term view of humanity, helping me realize that cultures change constantly and that despite what people tend to think, technological developments tend to come in leaps and starts.  In science fiction we often project technological changes as coming in an ever increasing flow, but with no real change in our political or philosophical view points.  That’s just not how it happens on a long term level.
If you ask me, technology changes in spurts and we are going through one now that started with the Industrial Revolution.  I suspect those changes will slow down eventually and we will go through a long fallow period, though I would not even begin to predict when that would be.
Culturally, however, most Science Fiction seems to predict a move towards a pan-galactic America where everyone speaks English. While there are clear present day analogies in the world I created, I tried not to make those assumptions. As a result, while democracy is definitely a political option in my world, it is not the only one, nor even the dominant one.
Furthermore, my archaeological past gives me inspiration for different cultures.  I look at existing or previously existing cultures and change them for my own purposes.  Tweak them a bit for future human civilizations, a lot for alien cultures.
More than that, however, I’d say the greatest impact that archaeology has on my writing is the experience of living with a small group of highly skilled people in isolated conditions for extended periods.  I suppose that’s really what my stories are about, not so much the social and political commentary but personal relationships between individuals living in extreme circumstances.
 
Subacuatica
I know that you did underwater archeology, does it help you to clear your mind and concentrate in whatever you want to achieve?
 
I think any archaeology does that. There is a certain Zen to doing archaeology, particularly when you’re doing initial surveys.  Those, particularly the ones done in North America, consist of excavating for weeks and often finding nothing.  I once calculated that I had excavated about a cubic kilometer of sterile dirt… that is holes with nothing in them.  Of course, I’ve also excavated some of the best sites imaginable, Mexican Pyramids, ‘Celtic’ chariot burials, Iroquois sites set at the base of the legendary birthplace of the Seneca nation; wonderful sites.  Those helped my archaeological career, but it was the miles and miles of nothing that helped my writing.  Spending days finding NCM (no cultural material), letting my imagination run in the background while keeping focused on the task at hand.
Are social networks important for you relationships with other authors and with your readers?
 
Yes.  Today social networks are important for everything.  For writing they are key to getting known as an author.  My own blog site has had a lot to do with getting me known by some fairly large named writers in the field, but the most important factor for blogs, facebook, twitter and the like is getting my name and work out there, and the most important of these are blog sites like yours.
Want people to know about my books?  Get people to read them and write about them.  Far better than any adverts. In this day of modern tech, where any idiot can self-publish, Book review bloggers are the gatekeepers.  They do the job that editors used to do (and still do, to be fair), particularly with self-published books.
Why did you decide to autopublish yourself?
 
I was torn about it, to be honest.  I’d sent the novel to a couple of the big houses and found that its mix of genres was a bit of a worry for them.  I was planning on going on down the list like most people, but then several of the big time authors I knew, those already signed with people like TOR, ACE or BAEN, suggested that I do the ‘Indie’ thing (that is Independent Publishing – the ‘hip’ name in English for self publishers).  These authors noted the success rates people were having and the reservation that many of the traditional publishing houses had towards publishing ‘genre bending’ works (I’m not really sure that’s what my novel is, but it is what they called it so…).  So, I followed their advice and… well here I am.
What can you tell us about Wordos?
 
The Wordos is an amazing writing group in Eugene Oregon (USA) that I was lucky enough to join while I was revising my novel.  It focuses on Speculative Fiction (science fiction, fantasy, horror and the like), particularly in short form, and has produced a number of award winning writers.  It follows very strict guideline in the reviewing process and there are a large number of very well respected and relatively big name authors who attend in order to share their insights and experience with the rest of us.  People like Jerry Oltion, Nina Hoffman, Jay Lake and the like are all members who attend or have attended on a regular basis.
The real strength of the group, however, is not in the big name or award winning authors, but in the format that the group follows.  After all, most of the members are not award winners, but new writers, and sometimes it’s their views that add the most to a story.
The Wordos meet every week and members sign up to submit stories for review. Everyone gets a chance and indeed, everyone has to submit at least two stories to three stories to even be allowed to be full members of the group.  Of course, before one is allowed to submit, one must first listen to a review of a story you read, then comment on other peoples stories for two weeks. Only then can you submit two stories (preferably one right after another).  Once done, if you still have the stomach to return, you are accepted as a member of the group (regardless of how good your stories are).  The format that we follow is based on the Clarion school of critique, and does not allow for personal comment or comparison to other tales.  Writers are not allowed to comment, question or justify during the review process, but can ask for clarifying questions at the end.
This works very well and builds a very good working relationship that limits the kind of personal issues that I’ve seen arise in other groups.  Their website (www.wordos.com) actually has a really good list of useful information.
Have you ever been contacted by some Spanish publisher to translate your books?
 
No, but I am more than open to such contact, or even working a deal with a good independent translator.  I always thought that this book in particular would do quite well in the Spanish speaking market, both Spain and Latin America.  After all, much of the book was inspired by the present day political and military conflicts in South America, as well as those in Ireland, Africa and Asia.
Can you explain us why did you choose to delay the release of “Strings on a Shadow Puppet”?
Ah.  Yes. That is a very sad story.
I was all set to release my book just before Christmas this past year when there was absolute tragedy that occurred in the small town of Sandy Hook, Connecticut.  A twenty year old man walked into an elementary school and started shooting. A short time later twenty-eight people were dead, not to mention the shooter himself: twenty-one of the dead were children.  They were first graders so they would have been between the ages of six and seven.
Now, as you know, the opening scene of my book includes the recording of a bomb going off in a school.  At the time I wrote it, I thought it might be a bit over-the-top, the worst thing I could imagine.  As it turned out, it was just a bit too close to reality.
Releasing a story with that opening at that time would have been disrespectful for anyone, but as it turns out, I actually have a personal tie to Sandy Hook. About twelve years ago, that is where I proposed to my wife.  It was where my engagement party was held. Hell, my own niece used to go to that school.
Even if I had not had any personal ties to the town, it would have been in poor taste to release my book right after that event.  So, I held off for about two months.  Even that seemed too soon, but I suspect it will always seem that way to me.
I think it was a great idea holding a contest to decide which will be the cover of your book, are you going to do it again?
 
I must admit I am somewhat torn about this.  I had such great success the last time that I am tempted to just stick with Kevin Klakouski, the winner of the competition.  He is tremendously talented and skilled, and a joy to collaborate with. Kevin brings his own vision to a project, but he is not anchored to it.  He is more interested in producing a work of quality that will do what is needed than in just creating his own artistic vision.  Mind you, his own art, that is the art that is inspired wholly by himself and not by other people’s books or projects, is pretty remarkable just on its own. Perhaps that is why he is able to put his ego to the side and produce what others need.
Even so, the contest clearly worked and produced what fellow author Jacob Boyd described as “Crazy Good cover art.”  More to the point, perhaps, I love the idea of giving international exposure to new artists.  Indeed, it was really interesting to be exposed to all the new visions and ideas presented to me in the contest.  Going through that again would be a real joy.  We’ll have to see.  The next book is probably a year out, so lots of time to decide.
What can you tell us about your new projects? Is the Encyclopedia Sophynensis going to exist?
At present I am working on “The Traitor’s Gambit”, a sequel of sorts to my first novel.  It continues the tale of some of the main characters, exploring in detail some of their motivations and moving their personal tales forward.  Of course, “Strings on a Shadow Puppet” was written to stand alone and comes to its own conclusion, so the sequel builds on that, answering some of the issues left unaddressed at the end of that book, while raising new ones.
Funny enough, there are fairly well developed drafts of books three and four that are just sitting waiting for me to turn back to.  Yet, before that, I need to write book two because, well, while editing “Strings on a Shadow Puppet” I needed to leave out some character development in order to increase tension (I really can’t go into that without spoiling the end of book one, but I’m sure you know what I mean).  Now, I need to close those character arcs before I can go on to where the third book starts.
So, once I publish “The Traitor’s Gambit”, there should be a much shorter turn around for the following books.  Yet, as I said from the outset, each book comes to an end in the same manner that “Strings on a Shadow Puppet” does.  No cliff hangers for six or seven years the way that some authors do.  At least… that’s what I say now.
As for the Encyclopedia Sophynensis, it already exists, but in a draft form.  I’ve written it as a bit of a continuity bible; a reference book to ensure that I don’t change things from one book to another.  Putting it together as a volume for publication, however, is another thing all together.  It would take a lot of effort that I would rather spend on writing the stories it describes.

When the series is done, or at least further along, I may well put it out as a fun little guide-to-the-side, as it were.  For now, however, I think I will just keep focusing on the novels.  Even so, I do intend to put a bit of a glossary in future books and the second edition of “Strings on a Shadow Puppet” to address some of the more military and world specific terms I use.

Thanks again to TL for his kindness. What are you waiting to read his book?

WW2.2 Operación Félix

operacionfelixDespués de la decepción que supuso la primera entrega de la serie WW2.2 empecé la lectura de este tebeo con menos expectativas, pero gracias al cambio de equipo creativo este segundo número me ha parecido mucho mejor.

Siguiendo la historia desde el punto de inflexión marcado por la muerte de Hitler antes de la Segunda Guerra Mundial, en este caso Alemania decide llevar a cabo la llamada Operación Félix, para conquistar el Peñón de Gibraltar y de este modo impedir que la flota británica controle el estrecho. En nuestra realidad, nunca se alcanzó un acuerdo entre España y Alemania, con lo que nuestro país fue neutral durante todo el conflicto, pero en este ucronía los alemanes reciben incluso el apoyo de la Legión para esta empresa.

Es curioso ver un tema de candente actualidad como es la situación del Peñón tratado desde una perspectiva históricoficticia.

El dibujo, aunque atrayente, quizá no sea el más adecuado para lo que se quiere narrar, porque los trazos rectos de Marcial Toledano dan un aire poco serio a la historia. Es de aplaudir la labor de documentación y la minuciosidad en cada detalle de la indumentaria de las tropas, que destaca el gran trabajo de búsqueda de información que sin duda ha llevado a cabo el dibujante. Me gustan también las escenas en los túneles de Gibraltar, donde se consigue transmitir una sensacion claustrofóbica muy acorde con la narración.

En el guión, José Manuel Robledo utiliza constantes trampas dentro de trampas haciendo que en algunos momentos se pierda el hilo de la historia. Es de todos conocida la existencia de luchas internas entre los cuerpos de élite de los nazis y quizá no hacía falta ahondar tanto en estos enfrentamientos. La idea es interesante y el hecho de que el legionario español hable alemán y sea un antiguo sacerdote da mucho juego en su relación con el enlace nazi.

En definitiva, este Operación Félix me ha reconciliado con la serie, y espero en fechas próximas seguir comentando los siguientes tebeos. El número tres, titulado Secret Service, me llama mucho la atención.

The shining girls

shiningCuando un libro viene tan recomendado, a veces da miedo empezarlo por si no se cumplen todas las expectativas que entre todos se han creado. Así comencé yo la lectura de esta obra de Lauren Beukes, pero afortunadamente he disfrutado mucho con ella y no me queda más remedio que unirme a la ola de hype que se ha creado.

Los asesinos en serie tienen algo que nos atrae, tal vez sea por su total ruptura de las leyes que a veces nos encorsetan o por la forma romántica en que se nos presentan, pero la cruda realidad es que son seres bestiales que dan rienda suelta a sus más bajos instintos. Así representa la escritora a Harper, un oscuro personaje que en los años treinta encuentra una casa que le permite viajar en el tiempo. Pero esta capacidad tiene su precio. Dentro de la casa existe una habitación dedicada a ser un macabro museo con recuerdos personales de mujeres a las que se siente compelido a asesinar.

Sin embargo, una de sus víctimas consigue escapar en los ochenta. Kirby dedica desde entonces sus esfuerzos a buscar a la persona que intentó matarla y entra como becaria a un periódico de Chicago buscando sus archivos sobre crímenes, con la esperanza de encontrar algún paralelismo que le permita localizar a su asesino frustrado. Como tapadera, ejercerá de becaria de Dan, periodista deportivo que otrora lo fue de homicidios

Los puntos de vista y la situación temporal va cambiando capítulo a capítulo. Mientras Harper cada vez siente más confianza en sus asesinatos y en sus viajes en el tiempo, Kirby se encuentra más perdida en su investigación. Y las víctimas se siguen acumulando.

No deseo desvelar nada más de la trama, pero hay que elogiar la labor de documentación llevada a cabo por Beukes y sus colaboradores, y también es impecable la claridad con la que se desarrolla la historia a pesar de los múltiples cambios de registro y de franja temporal.

La violencia está representada de una forma descarnada que a veces roza el gore, pero sirve para dar un aspecto más realista a la historia a través del sufrimiento corporal al que se ven expuestas las víctimas.

Las víctimas. Zora. Alice. Margot. Catherine. Jin-Sook… ellas son las verdaderas protagonistas de la historia. Dejan de ser un bonito cadáver para tener una propia historia y un bagaje que hace que brillen con luz propia. Los capítulos más interesantes son aquellos en los que llegamos a conocerlas e incluso a quererlas hasta que Harper nos las arranca de entre las manos. Según la entrevista que Lauren Beukes concedió a The Geek’s Guide to the Galaxy, una persona cercana a ella sufrió una muerte violenta y este hecho dejó una huella muy profunda en ella. Quizá este libro haya servido para exorcizar estos demonios.

Nominados a los National Book Awards de literatura juvenil

Esta es la lista de obras nominadas a los National Book Awards de literatura juvenil que son de género, según Locus:

“The True Blue Scouts of Sugar Man Swamp” de Kathi Appelt (Simon & Schuster)

“Flora and Ulysses: The Illuminated Adventures” de Kate DiCamillo (Candlewick)

“A Tangle of Knots” de Lisa Graff (Penguin),

“The Summer Prince” de Alaya Dawn Johnson (Scholastic),

“Far Far Away” de Tom McNeal (Random House)

“The Real Boy” de Anne Ursu (HarperCollins)

El escritor de género David Levithan está nominado por “Two Boys Kissing” (Random House), aunque este libro no lo es.

Wolf at the door

WOLFATTHEDOORAunque este libro se anuncia como YA, no tengo muy claro que con una protagonista madre de dos hijos el público objetivo sea el juvenil. Lo que sí tengo claro es que esta fantasía urbana situada en la exótica (para nosotros) Singapur es algo distinto a lo que estamos acostumbrados, y los cambios se agradecen.

El mundo real en el que todos vivimos está poblado de seres míticos: elfos, personas que cambian su forma a animales tan variopintos como lobos, zorros, dragones… Pero los que no tenemos las capacidades sensoriales necesarias no somos capaces de distinguirlos.

La narración de esta novela es desde el punto de vista de Jan Xu, una joven madre cuya familia tiene la capacidad de transformarse en lobo. Su hermana Marianne, sin embargo, no tiene esta capacidad y tras varios años viviendo en el Reino Unido vuelve a Singapur con Steve, cabeza visible de una fundación para la reintroducción del lobo en los bosques británicos. Jan Xu desconfía instintivamente de Steve, pero quiere mejorar su relación fraterna con Marianne.

La narración simultanea dos líneas temporales. Una se sitúa en la juventud de la protagonista, cuando junto con otros miembros de la Myriad (este conjunto de seres “mágicos” por definirlos de alguna manera) formó la Gang of Four, con la que se dedicaban a defender el mundo de los espíritus malignos. La otra es en la actualidad, donde vemos cómo se desarrollan los conflictos provocados por la vuelta de Marianne al país. Por desgracia, las dos líneas no están claramente diferenciadas y a veces es necesario un esfuerzo por parte del lector para situarse.

La parte actual me parece más interesante que la otra, que se utiliza como recurso para dar consistencia al pasado y tal vez justificar alguna de las decisiones posteriores, pero sin llegar a ser redonda. La trama es bastante obvia desde el principio, en esto no hay sorpresas.

Se nota que Joyce Chng conoce Singapur y esto se ve reflejado en la descripción de la ciudad y en pequeños detalles como la referencia al singlish. Me parece muy acertada la yuxtaposición de emociones animales y humanas cuando los personajes se encuentran en su forma animal. También se enfatiza mucho el papel familiar de los lobos, por ejemplo se ve cómo los padres de Jan son la pareja alfa del clan y cómo se ayudan unos a otros, cómo se acepta a su marido Ming aunque no sea lobo… Le da un aspecto creíble a la multitud de relaciones interpersonales que aparecen en el libro.

Si te gusta la fantasía urbana y quieres probar algo que no esté situado en el típico escenario que todos conocemos, deberías darle una oportunidad a “Wolf at the door”. Te lo pasarás bien.